En Tu Nombre Vivimos
Episodio 18:
El nombre de Al·lâh
Al·Ghafûr (El Muy Perdonador)
En el nombre de
Al·lâh,
el Todo Misericordioso, el Muy Misericordioso.
Las alabanzas son
para Al·lâh, Señor del Universo y los Rezos y la Paz de
Al·lâh sean sobre su mensajero (SAAWS)
Hoy vamos a vivir con uno de los nombres
más bellos de Al·lâh, muy
querido para nosotros, ya que toda la gente, sea
creyente o no, adora a Al·lâh, a Quien suele rogar con
este nombre tan querido. Un nombre que usamos día y
noche, con el que vivimos todo el día pero sin
comprender su significado preciso, pese a que venimos
reiterándolo desde que éramos niños hasta hoy día. Vamos
a hablar hoy de Al·Ghafûr (El Muy Perdonador).
Significado de
perdón, indulgencia o ¡pido perdón a Al·lâh!:
El término
“ghafara” (perdona) en árabe significa cubrir, ocultar y
preservar. Perdonar algo significa protegerlo de lo que
le pueda dañar. Los árabes dicen “ghafara azzawb”,
“perdona” la ropa, es decir, protegerla cubriéndola con
algo o guardándola en un armario para que no se ensucie.
Dicen también “ghifâra o al-ghifâra” para referirse a un
pañuelo que cubre la cabeza de la mujer por delante. Los
árabes dicen también “tiñe tu ropa” para cubrir y
ocultar sus defectos.
Qué significa que
Al·lâh es Ghafûr (Muy Perdonador):
La palabra
Perdonador significa que te cubre en esta vida y en la
Última y que te protegerá del infierno el Día del
Levantamiento. Así vemos que la expresión Perdonador
encierra tres acepciones:
1-
Te
cubre en esta vida
2-
Te
cubrirá en La Última Vida
3-
Te
protegerá del infierno
Que Al·lâh es
Perdonador, por tanto, quiere decir que Al·lâh perdona
tus pecados, que cubre tus fealdades en ésta vida y en
la Última y que te protegerá del infierno en el Día del
Levantamiento. Por eso, El Perdonador figura mucho en el
Corán, también la expresión “¡que Al·lâh me perdone!”,
es una de las expresiones más repetidas entre la gente y
los musulmanes, que significa ¡Al·lâh cúbreme y no me
pongas en evidencia! Es una plegaria a Al·lâh para que
te preserve y te cubra en ésta vida y en la Última.
Cubrirte en la vida no sólo significa protegerte de los
pecados sino también cubrirte de todo lo que es malo
como la carencia en el dinero o de todos aquellos
defectos que el mismo hombre genera o simplemente, de
todo aquello que le pueda dañar, ya que el ser humano es
una criatura débil que necesita de perdón y de
protección de Al·lâh.
Por eso los
profetas pedían perdón frecuentemente, como por ejemplo
nuestro señor Nûh (Noé) ‘AS’ TSQ,:
((Y les ha dicho: Pedid perdón a vuestro Señor, Él
es Muy Perdonador)), Sura 71, Nûh “Noé”:
Aleya 10. O sea, pedid a Al·lâh el perdón y la
protección, pues Él quiere (le gusta) perdonar... ((¿Qué
ganaría Al·lâh con castigaros si sois agradecidos y
creéis?...)), Sura 4, An·nisâ’ “Las Mujeres”:
Aleya 147.
Y también nuestro señor Ibrâhîm
(Abraham), quien dijo: ((Quien me creó y me guía,
Quien me alimenta y me da de beber, y Quien, cuando
estoy enfermo, me cura, y Quien me hará morir y luego me
devolverá a la vida, y de Quien espero con anhelo que me
perdone las faltas el Día de la Rendición de cuentas)),
Sura Ash·shu’arâ‘ “Los Poetas”: Aleyas 78: 82.
Tienes que considerar la importancia del
perdón al mismo nivel que a la de comer, beber y curarse
de la enfermedad.
Ese es nuestro señor Abraham (AS), padre
de los profetas, quien pidió perdón a su Señor al
reconocer su error (comprobó que cualquier astro del
firmamento termina poniéndose), y he aquí a nuestro
profeta Mohammad, señor de los Mensajeros- los
rezos y la paz de Al·lâh sean sobre él- quien solía
pedir perdón un centenar de veces al día. Entonces ¿cómo
deberíamos nosotros vivir con “El Muy Perdonador”?. El
hombre es muy débil; necesita de protección,
salvaguardia y custodia, así que es nuestro deber
conocer a Al·lâh con este nombre tan preciso, pues
Al·Ghaffâr “El Inmensamente Perdonador” es el que
protege a sus siervos y los cubre con Su protección en
la vida mundanal y en la eterna, además los guarda del
fuego, pues (Él) pone entre ellos y el fuego un velo
protector.
((...Bórranos las faltas, perdónanos y
ten compasión de nosotros. Tú eres nuestro Dueño,
auxílianos contra la gente incrédula)),
final de la Sura de La Vaca, aleya 286.
¿No te ha protegido el Señor varias
veces en la tierra? Pues, Él lo hizo para que sepas que
en el Día del Levantamiento hará lo mismo, así pues, si
contemplas tu vida pasada, te acordarás de muchas
situaciones en las que Al·lâh te ha protegido y no te ha
puesto en evidencia. Todo ello, para que puedas percibir
la protección de Al·lâh en el Día del Levantamiento - si
Al∙lâh así lo decide - y para que puedas alegrarte de Su
protección en ese día.
¿A quién perdona Al·lâh?
Al·lâh, Enaltecido sea, perdona a quien
quiere... ((A Él no se le pedirán explicaciones de
lo que hace, pero ellos sí serán preguntados)),
Sura 21, Al-Anbiyâ‘ “Los Profetas”: Aleya 23. También
Al·lâh en la Sura de Las Mujeres, aleya 48 dice:
((Es cierto que Al·lâh no perdona que se Le asocie con
nada, pero, fuera de eso, perdona a quien quiere...)).
Por esta razón, la súplica y el ruego
del perdón es muy importante en tu vida, pues siempre
necesitas el perdón de Dios, mientras Él perdona a quien
quiere.
¿Qué es lo que pasa si dedicas las
palabras con las que pides el perdón para un cierto
pecado que conoces muy bien, y Al·lâh luego te lo
concede?
Es cierto y verdadero que Al·lâh
Glorificado y Enaltecido sea perdona sólo a quien
quiere, pero Él te ha ordenado pedirle perdón solo con
el fin de concedértelo, así que puedes tranquilizarte.
Pide perdón con frecuencia y trata de percibirlo.
La diferencia entre Ghafûr (El Muy
Perdonador), Ghaffâr (El Inmensamente Perdonador) y
Ghâfir (El Perdonador) y las veces que son mencionados
en El Corán:
El nombre de Al·lâh Al·Ghafûr
está mencionado en el Corán 91 veces, el nombre
Al·Ghaffâr se cita 5 veces y el nombre de Ghâfir una
sola vez.
El nombre Al·Ghafûr viene mucho en el
Corán, por ejemplo: “Dijo: Señor mío, he sido
injusto conmigo mismo, perdóname. Y lo perdonó, es
cierto que Él es el Muy Perdonador, el Compasivo.”
(Al-Qasas (Los Relatos), versículo núm.
16).
Como ejemplo del nombre de Al·lâh
Al·Ghaffâr: “Y les he dicho: Pedid perdón a
vuestro Señor, Él es Inmensamente Perdonador.”
(Nûh (Noé), versículo núm. 10), “Y es
cierto que Yo soy Indulgente con el que se vuelve a Mí,
cree, actúa con rectitud y se guía.”(Tâ-Ha,
versículo núm. 82).
Y el nombre de Ghâfir: “Él que
perdona las faltas y acepta el arrepentimiento…”
(Ghâfir (El Perdonador), versículo núm. 3).
Los eruditos explican los significados
de los tres nombres distinguiendo que “Ghâfir” significa
que perdona un solo pecado, “Ghafûr” perdona muchos
pecados, aunque se trate de millares de faltas, entre
tanto “Ghaffâr” se utiliza para los delitos más graves e
intolerables.
El perdón de Al·lâh no tiene límites:
La gente se divide en tres tipos según
sus pecados: injustos, muy injustos y excesivamente
injustos “…Y entre ellos, unos serán injustos
consigo mismos…” (Fâter (El Originador),
versículo núm. 32), “…Realmente él ha sido muy
injusto consigo mismo…” (Al-Ahzâb (Los
Coaligados), versículo núm. 72), “Di: ¡Siervos
míos que os habéis excedido en contra de vosotros
mismos,…” (Az·zumar (Los Grupos),
versículo núm. 53).
Para cada categoría de ella hay un
nombre de entre los nombres más bellos de Al·lâh para
infundirles tranquilidad. Si tú eres injusto, debes de
saber que Él es Ghâfir, si tú eres injusto contigo mismo
has de comprender que Él es Ghafûr, y en el caso de que
te excedas injusticia contra ti mismo, debes saber que
Él es Ghaffâr. Percibimos que el perdón de Al·lâh y su
protección son ilimitados
Una evidencia de que el perdón de Al·lâh
no tiene fin… Un hadîz –dicho -del Mensajero de Al·lâh
(SAAWS): “Ÿibrîl me vino y me dijo: Da a tu nación la
buena noticia de que Al·lâh perdona todas las faltas. Le
pregunté: ¿aunque haya robado y haya adulterado?
Respondió: aunque haya robado y haya adulterado.
Exclamé: ¿aunque haya robado y haya adulterado?
Contestó: aunque haya robado y haya adulterado.
Interrogué: ¿aunque haya robado y haya adulterado?
Respondió: aunque haya robado, adulterado y bebido vino.
Di a tu nación que quien se encuentre con Al·lâh
sin haber asociado nada
con Él, Al·lâh le perdona todos sus pecados.”
En un dicho divino:
[Hijo de Âdam (Adán),
cada vez que me suplicas y me ruegas, te perdono a pesar
de todo y no me importa. Hijo de Adán, si tus pecados
alcanzasen la cima del cielo y me pidieras perdón, te
perdonaría. Hijo de Adán, si me vinieras con pecados
equivalentes a la tierra y te encontraras Conmigo sin
haber asociado, me encontraría contigo con su
equivalente en perdón…].
En un dicho,
cuenta el Profeta (SAAWS): “Un siervo ha cometido un
pecado y luego dijo: “¡Señor mío! he cometido un pecado,
perdóname, pues”. Entonces dijo Al∙lâh: “Mi siervo supo
que tiene un Señor que perdona los pecados y que castiga
por los pecados... He perdonado, pues, a mi siervo”.
Luego el siervo reincidió cometiendo otro pecado, y
luego dijo: “¡Señor mío! Perdónamelo”. Entonces Al∙lâh
dijo: “Mi siervo supo que tiene un Señor que perdona los
pecados y castiga por ellos, luego he perdonado a mi
siervo”. Después volvió el siervo a cometer otro pecado.
Entonces dijo Al∙lâh, Alabado y Enaltecido sea: “He
perdonado a mi siervo; que mi siervo haga lo que quiera
siendo que regresa a Mi y se arrepiente ante Mi.”
¡El perdón de Al·lâh no tiene límites
aun hablando de los incrédulos! Al·lâh dice: [Di a
los que se niegan a creer que si cesan, les será
perdonado lo que hayan hecho y esté consumado…]
Al-Anfâl 8 (Los Botines de Guerra: 38). Al·lâh perdona
también al incrédulo que haya luchado contra el Profeta
de Al·lâh [¡Profeta! Di a los prisioneros que
tengáis en vuestras manos: Si Al·lâh sabe de algún bien
en vuestros corazones, os concederá también algún bien
de aquello que se os quitó y os perdonará...]
Al-Anfâl 8 (Los Botines de Guerra: 70). Pues si Al·lâh
perdona al incrédulo, ¿no nos va a perdonar a nosotros?
Y es Él quien nos invita para que nuestros pecados sean
perdonados y quien nos perdona aun pudiendo castigarnos
[El que perdona el pecado y acepta el
arrepentimiento; El que es Enérgico cuando castiga y El
que da con largueza...] Ghâfir 40 (El
Perdonador: 3).
La recompensa de quien pide perdón:
El Profeta de Al·lâh, SAAWS, dijo:
[quien persista en pedir perdón, Al·lâh hará para él de
cada mal momento una salida y de cada pena una apertura
y le proveerá a partir de aquello que no se espera].
Y Al·lâh, Enaltecido sea, dijo: [Y les he dicho:
Pedid perdón a vuestro Señor, Él es muy Perdonador.
Enviará sobre vosotros el cielo con lluvias abundantes.
Y os dará más riquezas e hijos, así como jardines y
ríos. ¿Pero qué os pasa que no esperáis de Al·lâh
magnanimidad? Nûh 71 (Noé: 10-13).
¿Cuáles son las cosas que Al·lâh ha
mantenido veladas en esta vida y por qué?
¿Durante cuántos años has estado
desobedeciendo a Al·lâh y Él te ha tapado? Al·lâh es
Al·Ghafûr (El Muy Perdonador), no sólo vela los pecados
en esta vida sino que también mantiene ocultas otras
muchas cosas porque al mantenerlas así, resultan más
beneficiosas. Pues ha velado la Noche del Gran Prestigio
para que sus siervos trabajen y se esfuercen en los diez
últimos días de Ramadán. Ha velado la hora del viernes
en la que la súplica es respondida para que le supliques
todo ese día. Ha velado los nombres de sus allegados más
benefactores para que enaltezcas y respetes la
inviolabilidad de todos los musulmanes. Ha velado Su
Nombre Más Grande para que le supliques con todos sus
demás Nombres. Ha velado las ideas, pues nadie sabe en
qué está pensando la otra persona. Ha velado la
capacidad de oír de las personas, dejándola limitada...
Ha velado la visión de los ojos haciéndola limitada para
que no veamos los virus y microbios. Ha velado la hora
de la muerte para prepararnos a recibirla durante toda
la vida.
Quien mantiene en
secreto todo esto en esta vida, también lo hará el Día
del Levantamiento. Habrá gente a la que se le caerá la
carne de su cara El Día del Levantamiento por la
vergüenza que sentirán debido a las maldades que había
cometido, pues, dice Al·lâh, enaltecido sea, al siervo
el Día del Levantamiento: “Siervo mío, ¿recuerdas tal
pecado? Te lo he tapado de la gente en la vida mundana,
y he aquí que también hoy lo mantendré tapado. Ve, pues,
y entra en el Paraíso”. Así que, Al·lâh, Glorificado
y Enaltecido sea, perdona a Sus siervos una vez tras
otra, y no los pondrá en evidencia tal Día. Por tanto,
pidámosle perdón y volvámonos a Él para que no nos ponga
en evidencia en la Última Vida, tal como no lo hace en
esta vida.
A quien
Al·lâh no le perdona:
Dice el Profeta
(SAAWS), que los Rezos y la Paz de Al·lâh sean sobre él:
“toda mi Umma (la comunidad musulmana) es perdonable
– será perdonada si Al·lâh quiere- excepto los
manifestadores de los pecados. Preguntaron: ¿cómo,
mensajero de Al·lâh? Dijo: El hombre anochece y hace
algo de noche- una desobediencia- Luego amanece,
habiendo Al·lâh tapado su vicio para que no lo sepan los
demás, pero él dice a otro: he hecho esto y aquello,
destapando así el velo que Al·lâh ha puesto para
cubrirle”
Y debido a que
Al·lâh quiere el cubrimiento de los vicios de la gente,
ha hecho que la condición de la aplicación de la pena de
adulterio sea la existencia de cuatro testigos, puesto
que la existencia de cuatro testigos significa que este
acto tuvo lugar públicamente, lo que implica un motivo
de corrupción de la sociedad. Y si existieran tres
testigos solamente, sin el cuarto, esto no sería
suficiente para aplicar la pena... ¿Porqué? Porque
Al·lâh quiere que se eviten los escándalos.
Se narra que
cuatro personas se dirigieron a nuestro señor ‘Omar Ibn
Al-Jat·tâb para testificar en un caso de
adulterio, y tres de ellos testificaron que la vieron a
la mujer, mientras el cuarto dijo: sí, la he visto, solo
que él se parece a su marido. Y a consecuencia de esto,
no castigó al hombre ni a la mujer y aplicó la pena a
los tres testigos.
Otro caso: Un
día, mientras nuestro señor ‘Omar Ibnu Al-Jat·tâb
pasaba por un camino, vio a un hombre y a una mujer
cometiendo adulterio. Entonces dijo: “¡oh gente!, he
visto con mis ojos y he oído con mis oídos”. Entonces,
nuestro señor ‘Ali Ibnu Abî Tâlib le preguntó: “¿Príncipe
de los creyentes, tienes cuatro testigos?”. Le
respondió que no, así que ‘Ali Ibn Abî Talib le
dijo: “si profieres sus nombres, te daremos ochenta
azotes”. ‘Omar le dijo: “¡‘Ali, vi con mis ojos y oí
con mis oídos!”, entonces ‘Ali le respondió: “la
pena se aplicará a ti, en la espalda, si mencionas sus
nombres”.
Por eso es ilícito que uno difunda los
vicios y el pecado entre la gente ni que propague
falsos rumores de cara a envilecer
a la gente ¡Cuidado, periodistas,
con hacer tal cosa!. Porque el fundamento está en
guardar la privacidad de los creyentes y de la sociedad.
Al·lâh, Enaltecido y Glorificado dice
-lo que podemos traducir como-: [Verdaderamente
aquéllos que desean que se propague la indecencia entre
los que creen, tendrán un castigo doloroso en esta vida
y en la Otra. Al·lâh sabe y vosotros no sabéis. ]
(TSC, Sura 24, An·nûr "La Luz" : Aleya 19).
¡Tú que cometiste el pecado de la
fornicación sin que haya sido revelado tu secreto!, pide
perdón a Al·lâh pues Él te lo ha perdonado al mantener a
salvo tus secretos. A este respecto, el Profeta SAAWS
dice:
« Al∙lâh es muy Pudoroso, muy
defensor de la privacidad, amante de la discreción. Así
pues, si alguien de vosotros se toma un baño, que
procure hacerlo en privado»
Dos tipos de mi Umma (La comunidad
musulmana) no percibirán el olor del paraíso –
o sea, se retrasará su entrada al
paraíso- y ciertamente, el
olor del paraíso se podrá percibir a una distancia de
quinientos años…- entre estos
dos tipos figura - mujeres
semivestidas-semidesnudas »
Esto porque Al∙lâh es Inmensamente
Perdonador, muy amante de la decencia, y las mujeres
semivestidas-semidesnudas están ciertamente muy alejadas
del nombre de Al·Ghaffâr (El Inmensamente Perdonador)
¿Cómo debemos interactuar con
Al·Ghaffâr ( El Inmensamente Perdonador) ?
Debes llevar a cabo abundantes obras de
caridad y procurar obrar bien lo más posible, para que
en el Día del Juicio se contabilicen como obras “de
mérito” en tu balanza, tales como contribuir y servir al
Islam y a los musulmanes.
Obsérvese la historia de Hatib
Ebnu Za’laba, compañero del Profeta SAAWS, quien
presenció la batalla de Badr, pero una vez en Madina
(Medina) envió a Qoraysh para avisarles de la próxima
salida del Profeta SAAWS con vistas a conquistar Makka
(la Meca). Era sólo para advertir a su familia a fin de
que tomaran sus precauciones y no por ser un hipócrita.
Acto seguido, desciende Ÿibrîl (AS)
El Arcángel Gabriel y revelando al Profeta SAAWS
lo que había pasado realmente. Cuando los compañeros se
enteraron de lo que había pasado, ‘Omar Ibnu Al Jattâb
pidió al Profeta permiso para matar a Hâtib. En cambio,
el Profeta SAAWS no estaba de acuerdo con él y le
replicó:
« Quizás Al∙lâh haya valorado a la gente
de Badr y es como si les dijera ‘Haced
lo que queráis, pues os he perdonado’ ». En
seguida, ‘Omar rompió a llorar conmovido por el inmenso
perdón de Al∙lâh.
Entre los medios para multiplicar
nuestras obras de caridad figuran el mes de Ramadán.
Procuremos, pues que nuestra proporción de actos de bien
sean lo más abundantes en este mes, para que intercedan
a nuestro favor en el Día del Juicio. Eso porque se dice
que las obras de caridad del pecador interceden por él.
«Quien ayune un día para Al∙lâh,
Al∙lâh pondrá entre él y el Infierno una distancia de
setenta otoños». Que hará, pues, con quien ha
ayunado treinta días?
Que ayunemos, leamos el Qor´ân y hagamos
lo posible para que nuestros actos de bien sean lo más
abundantes posible.
Al comentar Ibnu Taymiyya las faltas de
Mûsâ “Moisés” dijo: “Asesinó a un hombre, arrastró a su
hermano de su barba, tiró las tablas divinas.... todas
estas faltas le han sido perdonadas por el simple hecho
de plantar cara al Faraón con total sinceridad en el
camino de Al·lâh, mientras que nuestro señor Yûnos
“Jonás” no tenía acumulado suficientes recompensas
como para que Al·lâh le perdonase. Sin embargo al
cometer un pecado Al·lâh hizo que lo tragara el pez. Él,
consciente de sus actos, se arrepintió y glorificó a su
Señor estando en dicha situación. Fue su alabanza y
glorificación a Al·lâh lo que le sacó del vientre de
aquel pez: “Si no hubiera sido de los
que glorifican, habría permanecido en su vientre hasta
el día de la Resurrección.”
Sura
(capitulo)As·sâffât (Los
puestos en Fila) aleyas (versículos) 143- 144.
Cuando el compañero ‘Uzmân Ibnu ‘Affân
financió con su dinero la preparación del ejercito de
los musulmanes en una ocasión, le dijo el Profeta, que
los rezos y la paz de Al·lâh sean sobre él: “No
perjudicará a Uzmân ninguna obra que haga
después”
Si deseas sinceramente ganar la
protección de Al·lâh, pues, tendrás que obrar algo bueno
y útil. Hay muchas pautas ejemplares a seguir:
educación (educar correctamente a los hijos...),
fundaciones (proporcionar hogares para huérfanos..),
adoración (oraciones prolongadas, obediencia,
imploraciones y ruegos..)
Cómo vivir con los nombres de Al∙lâh
Al·Ghafûr y Al·Ghaffâr :
Ø
Hacer más actos de bien.
Ø
Pedir perdón a Al·lâh más a menudo
Ø
¡Proteger la intimidad de la gente! El
Profeta, que los rezos y la paz de Al·lâh sean sobre él,
dijo: “quien de entre vosotros proteja la intimidad
de un musulmán en la vida, Al·lâh protegerá su intimidad
tanto en esta vida como en la otra” y dijo también:
“ no hagáis daño a los siervos de Al·lâh, ni andéis
en busca de sus vergüenzas o intimidades, ya que quien
busque la intimidad de su hermano musulmán, Al·lâh le
avergonzará en su propia casa” (Narrado por el imám
Ahmad)
“Un día se presentó un hombre ante el
Profeta SAAWS y le dijo: ¡he visto con mis propios ojos
a una persona cometer el adulterio! Entonces le contestó
el Profeta con lo siguiente: “¿acaso no pudiste
taparlo aunque solo fuera con tu propia ropa?”
La protección de la intimidad se puede
llevar a cabo de diferentes maneras: dando de comer a
algún mendigo, proteger y no contribuir en la difusión
de las intimidades y faltas de las personas....
La protección de la intimidad es
necesaria para que lo inmoral no se expanda en la
sociedad, dando pie a que las bajas pasiones y la
desobediencia reinen entre la gente. Uno de los
requisitos para el desarrollo y el progreso del mundo
reside en la protección de la intimidad, a fin de que la
Tierra se mantenga pura.
Es esta la finalidad que se persigue del
nombre de Al·lâh, El Muy Perdonador, El Inmensamente
Perdonador.
Al∙lâh=
significa Dios. Es el Nombre Más Grande que
ostenta el Único Creador que posee todos los
atributos propios de la divinidad, tal como fue
revelado en el Qor´ân.
(SAAWS):
Sal·la Al·lâhu Alayhi
Wa Sal·lam: Los Rezos y la Paz de
Al∙lâh
sean sobre él, que es explicada por los ulemas
como sigue:
Sal·la
Al·lâhu Alayhi:
significa que le cubra con su misericordia…El
motivo de traducirlo literalmente es porque
estas palabras son repetidas por los musulmanes
de todo el mundo, siguiendo el precepto divino
de decir esta expresión siempre que se mencione
al Profeta, en la llamada a la oración (Al
Âdhân) o en cualquier circunstancia, como
veneración concedida por Al·lâh a Su último
Mensajero, que ha sido enviado a toda la
humanidad. Wa sal·lam:
significa: y derrame Su Paz sobre él.
Fuente:
www.amrkhaled.net