En Tu Nombre Vivimos
Episodio 13:
El nombre de Al·lâh
Al·Hamîd
(El Muy Loable)
En el nombre de Al·lâh,,
el Todo Misericordioso, el Muy Misericordioso
Las Alabanzas
son para Al·lâh, Señor del Universo y los Rezos y la Paz
de Al·lâh sean sobre Su mensajero (SAAWS)
,
Os voy a pedir un favor antes de
proseguir nuestra conferencia. Os pido que traigáis un
bolígrafo y un papel; los vas a necesitar para poder
sacar provecho realmente de la conferencia.
Vamos a vivir en las siguientes
líneas con Al·Hamîd (El Muy Loable).
Significado de Al·Hamîd (El Muy
Loable):
Loable es un nombre derivado de
loar, contrario de censurar o juzgar desfavorablemente.
Lo que es perfecto se loa, y lo imperfecto se censura.
El Perfecto absoluto es
Al·lâh, Glorificado y Enaltecido sea. Es Loable en Su
existencia, en Sus actos, Su creación, Su legislación, y
en Sus palabras. Es Al·lâh, Glorificado y Enaltecido
sea. No hay otro Loable en el universo más que Al·lâh,
Glorificado y Enaltecido sea. La palabra loa se usa para
dar por bueno algo perfecto.
Diferencia
entre agradecer y loar
-
agradecer está en un nivel bajo al de loar. Tú puedes
agradecer a una persona pero sólo loas y alabas a Al·lâh,
Glorificado y Enaltecido sea.
-
Loar
es más general que agradecer. Tú loas a Al·lâh,
Glorificado sea, por Su Ser, por ser Glorioso, Completo,
Sublime, y por Su infinita bondad. Pero agradecer viene
a cambio de un servicio determinado.
Ahora vamos a
vivir juntos cómo el Profeta, que los Rezos y la Paz de
Al·lâh sean sobre él, loaba a Al·lâh, Glorificado y
Enaltecido sea. Siente dentro de ti estas palabras
mientras recuerdas cómo Al·lâh derrama sobre ti Sus
dones:
“Alabanzas
a Tí, que eres El Rey de los cielos y la tierra y de
todo lo que hay en ellos. Alabanzas a Ti, que eres la
luz de los cielos, de la tierra y de todo lo que hay en
ellos. Alabanzas a Ti, que eres
El Eterno Sustentador
de los cielos,
de la tierra y de todo lo que hay en ellos. Alabanzas a
Ti, que eres
La Verdad,
Tu promesa es verdad, Tu encuentro es verdad, el Paraíso
es verdad, el Infierno es verdad, los Profetas son
verdad, y Mohammad, que los Rezos y la Paz de
Al·lâh sean sobre él, es verdad.
“Oh Al·lâh,
para Ti son las alabanzas de manera infinita, pura y
bendecida; alabanzas que llenan los cielos, la tierra,
lo que está entre ellos, y todo aquello que desees,
merecedor de toda Exaltación y Gloria. Lo más justo que
ha pronunciado un siervo, y todos somos Tus siervos, es:
No podemos abarcar el grado de Exaltación que mereces
de la manera como Tú lo abarcas”.
“Oh Al·lâh,
Alabado seas de una forma digna de la Majestuosidad de
Tu Faz y de la grandeza de Tu Soberanía”.
“Oh Al·lâh,
éramos débiles y Tú nos has concedido fuerza; para Ti,
la Alabanza. Éramos humillados y nos has honrado; para
Ti, la Alabanza. Éramos pobres y nos has enriquecido;
para Ti, la Alabanza. Para Ti, la Alabanza, por el
Islam; para, Ti la Alabanza, por la fe; para Ti, la
Alabanza, por el Qor´ân; para Ti, la Alabanza, por la
familia, los hijos y el dinero. Oh, Señor, a Ti todas
las alabanzas y loas; a Ti toda la soberanía y todo
asunto vuelve a Ti”.
Cuando
escuchamos las súplicas del Profeta – que los Rezos y la
Paz de Al·lâh sean sobre él – sentimos que cada respiro,
cada gota de sangre, cada abrazo hacia nuestros hijos,
cada moneda en nuestro bolsillo, cada mirada de nuestros
ojos y cada movimiento de lengua, quiere pronunciar: ¡la
alabanza es para Al·lâh Glorificado sea!, “Todos
los dones que tenéis vienen de Al·lâh...”
(TSQ),
Sura de Las
Abejas, aleya 53... Por tanto, alabado eres, Al·lâh,
tanto como el número de gotas de lluvia, de hojas de los
árboles, tanto como el número de personas a las que
embarga la noche y de las que saluda la luz de la
mañana. La alabanza es para Al·lâh, El Muy Loable, a
Quien se alaba en toda Su creación por todo lo que creó.
Ahora trae un folio y un bolígrafo,
no importa si el folio es pequeño o grande: “Si
tratarais de contar los dones de Al·lâh no podríais
enumerarlos...” Sura de La Abeja, aleya 18. Pues
si pensaras en el efecto y en el mérito de uno sólo de
esos dones, llenarías páginas y páginas...
Y ahora escribe en medio del
renglón:
El nombre de Al·lâh “El Muy
Loable”:
“Todos los dones que tenéis vienen
de Al·lâh...” Sura
de La Abeja, aleya 53.
Intenta sentir y gustar el
significado de “Todos los dones que tenéis”.
Nada en tu naturaleza, en tu existencia y en torno a
ti que no sea un don de Al·lâh.
Te ayudaré a escribir,
proporcionándote algunos puntos que te harán recordar
los dones y las gracias de Al·lâh hacia ti:
▪ El don del vestido: Si nos
remontamos al origen de este vestido, nos daremos cuenta
de que procede de Al·lâh, pues es de algodón, de lana,
de piel o de lino, y la procedencia de todo esto no es
de nadie sino de Al·lâh. El Profeta (SAAWS) cuando se
vestía, solía decir: “la alabanza es para Al·lâh,
Quien me ha otorgado este vestido para cubrir mis partes
íntimas y para embellecerme entre Sus criaturas”.
Así pues, sin este vestido, tú estarías completamente
desnudo y Al·Hamîd “El Muy Loable” es Quien nos ha
otorgado la gracia del vestido. La alabanza es para Él,
Glorificado sea.
▪ Los muebles de tu casa:
por muy lujosos que sean, su origen es de madera, y el
origen de ésta es semilla y lluvia del cielo.
▪ Tu casa y sus muros: no
son otra cosa sino minerales extraídos y sacados del
fondo de la tierra, para que Al·lâh, El Muy Loable, te
de protección.
▪ Tu alimento: también su
origen es una semilla hundida en la tierra. Al·lâh,
Enaltecido sea, en la sura de “Frunció el ceño” dice, lo
que se puede traducir como: “Que se fije el hombre
en lo que come: cierto que hacemos que caiga agua en
forma de precipitaciones, y seguidamente hendimos tierra
en surcos, y hacemos que en ella broten granos, viñedos
y hierbas comestibles, olivos y palmeras, frondosos
vergeles...” Aleyas 24:30.
▪ Tu
bebida:
¿Qué decir de una sola gota de agua
que necesitamos?.
Egipto, como suele decirse, es
presente del Río Nilo, pero ¿el Nilo es presente de
quién? Sin duda es presente y gracia de
Al·Hamîd,
Glorificado y Enaltecido
Sea. En un cuento se narra que una persona se perdió en
el desierto. Cuando estaba buscando agua para saciar su
sed, de repente encontró un saco brillante colgado de un
árbol. Pensó que sería agua, pero cuando se acercó a él,
descubrió que era oro. Dijo: “¡Desgraciado de mí, este
es oro y no agua!... ¿Qué valor tiene el oro sin el
agua? Quien muere en el desierto de hambre, se suele
encontrar con la cara llena de llagas por culpa de la
sed. ¡Gracias a Al∙lâh por la merced del agua!
La salida de una sola gota de agua
del cuerpo: Esta es una
gran gracia que merece toda alabanza. ¡Imagina que la
gota de agua que entrara en tu cuerpo no pudiera salir!
Una vez Hârûn Arrashîd fue a su exhortador, Ibnu Samak,
y le dijo: Exhórtame. Le preguntó éste: Oh príncipe de
los creyentes, ¿cuánto pagarías de tu reino si te
negaran este vaso de agua? Le contestó: Pagaría la mitad
de mi reino. Le dijo Ibnu Samak: En el caso de que te
ofreciesen el vaso de agua, lo bebieras y estuviera
retenido dentro de ti. ¿Cuánto pagarías por desalojarlo?
Le respondió: Pagaría la mitad de mi reino. Entonces le
dijo: Un reino entero no vale un solo trago de agua y su
salida. Vale mucho menos “¿Os habéis fijado en el
agua que bebéis?” (Sura de Al-Wâqe'a (Lo que ha
de ocurrir), versículo núm. 68).
▪ La
vigilancia: La gente
dice: el ojo tiene un guardián. Cierto, tenemos una
vigilancia de parte de Al∙lâh. ¿Has leído Su dicho,
Enaltecido Sea?, lo que se puede traducir como:
“(El hombre) tiene (ángeles) que se van turnando delante
y detrás de él, que le custodian por mandato de Al·lâh…”
(Sura de Ar·ra‘d (El Trueno), versículo núm. 11).
Existen unos ángeles, cuya función es la protección por
orden de Al∙lâh, pero cuando se impone el destino de Al∙lâh
te dejan a su suerte. ¡Cuantas veces hemos estado a
punto de pasar por accidentes que han estado a punto de
acabar con nosotros de llegar a tener lugar!
▪ Tú
mismo: Mírate a ti mismo
y alaba a
Al·Hamîd.
Enumera las gracias de Al∙lâh
sobre ti. ¡Cuán numerosos son Sus dones!
Tú ves, mientras otros no ven, oyes y otros son sordos,
tienes cordura y otros son locos, sientes y otros no
sienten, y amas y eres amado y otros son duros de
corazón. Imagina que Al∙lâh, Glorificado Sea, no
nos diera órganos y nos dejara la tarea de comprarlos en
el universo, y fueras a comprar los de tu hijo antes de
su nacimiento. ¿Cuánto cuestan los riñones y los ojos en
el caso de tener que adquirirlos?
Lee el dicho de Al∙lâh, Enaltecido
Sea, lo que se puede traducir como: “¿Acaso no le
hemos dado dos ojos (8) una lengua y dos
labios? (9) ¿Y no
le hemos señalado las dos vías?” (Sura de
Al-Balad (El Territorio), versículos núm. 8-10).
▪ La
respiración: Añade la
gracia de la respiración. ¡Imagina que Al∙lâh te
encargara la función del pulmón, y fueras tú quien lo
tuvieras que mover para respirar! Si esto sucediera así,
nuestro único trabajo en nuestras vidas sería hacer
funcionar nuestros pulmones y moverlos para respirar.
Apunta que Al·Hamîd
es Quien les está ordenando en estos momentos a éstos
que respiren.
▪ El alma: escribe en tu
folio que Al·lâh te ha favorecido dándote un alma. Pues
lo que te diferencia de las estatuas, es el alma que
Al·Hamîd (El Muy
Loable), Bendito y Enaltecido sea Su Nombre, te
ha otorgado.
▪ El Islam: ¿Se te ha
olvidado incluir el más grande de los beneficios y es
que eres musulmán?
▪ Ramadán: ¿No es un favor
de Al·lâh, el que te haya hecho vivir hasta Ramadán?
▪ Poder prosternarte ante Al·lâh.
▪ El Paraíso: ¿Se te ha
olvidado apuntar el Paraíso? La nube pasa por donde los
habitantes del Paraíso y les dice: “Habitantes del
Jardín, me ha enviado Al·Hamîd (El Muy Loable),
Bendito y Enaltecido sea su Nombre, para preguntaros qué
es lo que queréis que llueva”.
Al·Hamîd, es quien nos ha
vestido, nos ha dado cobijo y nos ha alimentado, y solo
Él, Bendito y Enaltecido Sea, merece ser alabado.
Acuérdate de los beneficios que Al·Hamîd te ha
otorgado y escríbelos, escribe y escribe hasta llenar
hojas y hojas, y di: ¡Alabanzas a Al·lâh!, con
todos tus sentimientos, y sintiendo las lágrimas que se
derraman por tus ojos y por tu alma y no lo repitas sólo
con la boca. Di ahora, al mismo tiempo que lo hago yo:
¡Alabanzas a Al·lâh!, ¡Alabanzas a Al·lâh!¡
¡Alabanzas a Al·lâh!
Y repite al mismo tiempo que lo
hago yo: ¡Alabanzas a Al·lâh!, alabanzas infinitas,
puras y bendecidas, que contengan los cielos, la tierra
y lo que hay entre ellos, y todo lo que quieras, oh
Al·lâh, para siempre. ¡Alabanzas a Al·lâh!, quien nos ha
guiado, ¡Alabanzas a Al·lâh! quien con sus beneficios se
llevan a cabo las acciones de Bien, ¡Alabanzas a Al·lâh!,
quien dice en su Libro, lo que se puede traducir como:
[Las alabanzas a Al·lâh que ha hecho descender a Su
siervo el Libro y no ha puesto en él tortuosidad.]
Al-Kahf 18 (La Caverna: 1). ¡Mis alabanzas a Al·lâh!,
quien dice en su Libro, lo que se puede traducir como:
[Las alabanzas a Al·lâh que dio comienzo a los cielos
y a la tierra…] Fâter 35 (El Originador: 1).
¡Alabanzas a Al·lâh!, quien oye las voces de
todos quienes le suplican, y les responde, sin que eso
le haga entretenerse y no escuchar a los demás,
¡Alabanzas a Al·lâh!, ¡Alabanzas a Al·lâh!, ¡Alabanzas a
Al·lâh!
Y aquí tienes este Hadîz qodsiyy
(Dicho Divino): “Oh, siervos míos, todos estáis
desnudos, salvo aquel a quien Yo he vestido. Así pues,
¡pedidme a Mí la vestimenta y os vestiré!. Oh, siervos
míos, todos estáis hambrientos salvo aquél a quien he
dado de comer. Así pues, pedidme a Mí el alimento y os
alimentaré. Oh, siervos míos, todos estáis extraviados,
salvo aquel a quien Yo he guiado. Así pues, pedidme guía
y os guiaré. Oh, siervos míos, cometéis errores de noche
y de día, y Yo perdono todos los pecados. Pedidme pues,
perdón y Yo os perdonaré.”… ¡Alabanzas a Al·lâh!
Hermano, ¿no te avergüenza darle
las gracias a un humano porque te haya hecho un favor…?
(Y esto no es un error porque “quien no da las gracias a
la gente, tampoco lo hace con Al·lâh”) Pero, ¿no te
avergüenza dárselas a quien ha sido creado y no hacerlo
a El Creador, El Muy Loable, Bendito y Enaltecido sea?
Observa las palabras que le dirigió
Mûsa “Moisés” a Al·Hamîd, El Muy Loable: Oh
Al·lâh, ¿cómo puedo agradecerte, teniendo en
cuenta que agradecer es un beneficio que merece ser
agradecido!?. Y entonces Al·lâh, Bendito y
Enaltecido sea su Nombre, le inspiró: “Oh Mûsa
“Moisés”, si te has dado cuenta de eso, ya me has
agradecido.”
¿Acaso no te avergüenza que todo el
universo le glorifique, ¡Glorificado y Enaltecido sea!?:
“...No hay nada que no Lo glorifique alabándolo, sin
embargo vosotros no entendéis su glorificación.”
Sura del Al-Isrâ´,
Viaje nocturno, aleya (versículo)
44. Los genios, hermanos, cuando escucharon su dicho:
“. ¿Qué dones de vuestro Señor podrán ambos negar?”-
sura del Ar·rahmân, El
Todo Misericordioso, aleya 13-
dijeron lo que dijo el Profeta, que los Rezos y la Paz
de Al·lâh sea sobre él, a sus compañeros: “¿Porque no
decís lo que dijeron los genios?”. Le preguntaron: “y
¿qué dijeron los genios, mensajero de Al·lâh?” Les
contestó: “¡Señor! no negamos ninguna de tus gracias”
Pues el Universo entero lo glorifica incluso lo inerte
(la arena, y todo lo sólido), y las criaturas...
“No hay nada que no Lo glorifique alabándolo, sin
embargo vosotros no entendéis su glorificación.”
Sura del Al-Isrâ´,viaje
nocturno, aleya 44. ¿No te avergüenzas cuando escuchas
este versículo!?: “ Es cierto que el hombre es
ingrato con su Señor, (7)siendo
Él testigo de ello” Sura (capitulo) de
Al-'Âdiyât,
los Corceles, aleya 6-7. El hombre solo
recuerda de Él las desgracias y nunca las gracias.
¿No te impresiona el dicho del
Profeta, que los Rezos y la Paz de Al·lâh sean sobre él,
cuando dijo al entrar a Madina: “¡Oh gente! Amad a
Al·lâh con todo vuestro corazón, amad a Al·lâh por las
gracias que os ha concedido”?
Y Al·lâh reveló a Dâwûd (David): “Oh
Dâwûd (David), háblale a la gente sobre mis gracias y
mis beneficios porque los corazones han sido dotados
innatamente con amor hacia quien obra bien con ellos”
El loor es la diferencia establecida entre una persona
creyente y otra no creyente. Esta última queda presa del
disfrute de la gracia mientras que la persona creyente
atribuye la gracia al Bienhechor, Glorificado y
Enaltecido sea, viviendo, así, más relacionada con El
Muy Loable.
Fíjate en el versículo que inaugura
el sagrado Qor´ân, lo que se puede traducir como:
“Las alabanzas a Al·lâh, Señor de los mundos”
Sura de Al-Fâtiha "La sura que
abre el Libro", aleya 1,
“...no acepta de Sus siervos la
incredulidad. Pero si agradecéis, os lo aceptará
complacido” Sura de
Az·zumar, los grupos aleya
7. Al·lâh se complace con sus siervos cuando éstos lo
alaban al alimentarse o al saciar su sed, siendo así la
alabanza el único acto de adoración que te ha sido
permitido manifestar y exteriorizar: “Y habla del
favor que tu Señor te ha dado” sura de
Ad·dohâ, la
Claridad matinal aleya 11.
En el Día del Levantamiento, la
mediación del Profeta, que los Rezos y la Paz de Al·lâh
sean sobre él, comienza con su alabanza a Al·lâh para
pedir la intercesión, como relató él mismo: “Me
inclinaré bajo el trono y alabaré a Al·lâh con
alabanzas como nadie Le dirigió anteriormente”
Cuando lo haya hecho le dirá Al·lâh, Enaltecido sea: “Levanta
tu cabeza: pide y te será concedido; intercede y se
aceptará tu intercesión” Entonces dirá el Profeta: “Señor,
da permiso para que comience el Juicio Final”. La
primera pegunta que te hará, Glorificado y Enaltecido
sea, cuando estés a solas entre sus manos es: “¡Oh
Fulano! ¿Acaso no te he concedido gracias?” Es
decir, el juicio comenzará con un reproche acerca de Sus
gracias. Pero imagínate que hayas sido de los que Lo
alababan por sus múltiples dones, y entonces tal vez Le
dirías:
“Señor te alababa por las
gracias” Entonces Él te dirá, Glorificado sea: “Dices
verdad, siervo mío”
¡Hermanos! la alabanza protege del
castigo. ¿No has oído su dicho, Enaltecido sea?:
“¿Qué ganaría Al·lâh con castigaros si sois agradecidos
y creéis? Al·lâh es Agradecido y Conocedor”
Sura de An·nisâ,
las mujeres aleya 147. Además, la
alabanza concluye el juicio final: “Y verás a los
ángeles, alrededor del Trono, glorificando a su
Señor con alabanzas...” Sura de
Az·zumar,
los grupos, aleya 75. Y al entrar en el Jardín se Le
alabará también: “Y dirán: Las alabanzas a Al·lâh
que ha cumplido Su promesa con nosotros haciéndonos
herederos de la Tierra. Nos acomodaremos en el Jardín
donde queramos. ¡Qué excelente recompensa la de los que
actúan!” Sura de Az·zumar,
los grupos, aleya 74. En el día del
Levantamiento se dirá: “¿dónde están los alabadores?
Entonces se levantará gente, se alzará una bandera que
lleva escrito “bandera de la alabanza”. Se señalará a
ellos, cuando entren en el Jardín: ¡Esos son los
alabadores!”
¿Con qué te obsequiaría Al·Hamîd
"El
Muy Loable”
si lo alabas con
abundancia tanto con tu lengua como con tu corazón?
[
...
Si sois agradecidos, os daré aún más...
] (Sura de Ibrâhîm
"Abraham" : Aleya 7)
En el mismísimo momento en el que
dices Alhamdu-lil·lâh (alabado sea Al·lâh),
Glorificado y Enaltecido Sea, estate seguro que Al·lâh
te agracia con una de sus bendiciones. Observa que
Al·lâh, Glorificado y Enaltecido sea, te exhorta a que
Le alabes para darte más, y no porque necesite tu
agradecimiento. Al·lâh, Glorificado y Enaltecido Sea,
dice, lo que se puede
traducir como: [ No quiero de ellos provisión ni
quiero que Me alimenten. ] (Sura de
Adh·dhârriyyât "Los Vientos Que Arrastran" : Aleya 57).
Al·lâh nos pide que aspiremos a que
nos dé más y anhelemos lo que tiene. A este respecto, el
Profeta SAAWS dice: «Cualquiera que diga: Alhamdu-li-Al·lâh
(Alabado sea Al·lâh) está dando lugar a una
bendición»
Y dice SAAWS: “Alhamdu-li-Al·lâh
(Alabado sea Al·lâh) llena la Balanza”
En un Día respecto al cual Al·lâh
dice, lo que se puede traducir como: [ Y el que
haya hecho el peso de una brizna de bien, lo verá; Y el
que haya hecho el peso de una brizna de mal, lo verá]
(Sura de Az·zalzala "El Terremoto" : Aleyas
7-8).
En un Día en el cual el incrédulo
lanza su cuerpo en la balanza
buscando frustradamente que la balanza se incline a su
favor".
[Esos serán los que negaron los
signos de su Señor y el encuentro con Él, sus obras se
hicieron inútiles y el Día del Levantamiento no tendrán
ningún peso. ] (TSC,
Sura 18, Al-Kahf "La Caverna" : Aleya 105.
Pero la palabra de “Alhamdu-lil·lâh
” llena toda la balanza.
El Profeta SAAWS dice en el hadîz:
“Ciertamente, dijo un siervo: “Oh Señor, mereces las
más perfectas y sublimes alabanzas tal como lo merece la
Majestuosidad de tu Faz y la Grandiosidad de Tu Poder.
Al escucharle los dos ángeles (encargados de
notificar el bien y el mal) quedaron perplejos ante
esta expresión no sabiendo cómo escribirla. Entonces,
Al·lâh les dijo: escribidla tal como la dijo mi siervo,
Yo lo retribuiré por ella en el Día del Levantamiento".
En Ramadán no olvides darle las
debidas alabanzas mediante la adoración, leyendo el
Qor´ân y haciendo el bien. Lo cierto es que
si Lo alabas, Glorificado y Enaltecido Sea, te da más, y
más te dará en la Noche del Gran Prestigio (Laylatul-Qadr).
Y puede que te libere del Infierno.
Negarse a alabar a Al·lâh:
¿qué acarrea?
El hecho de no agradecer a Al·lâh por
sus bendiciones para con nosotros da lugar a lo
siguiente:
- Se le puede privar, en
definitiva, de la bendición.
- Puede que desaparezca la dulzura
de la bendición.
- Puede que se convierta en una
desgracia (por ejemplo, que tu hijo o tu fortuna se
conviertan en motivo de tu desdicha)
- Puede que sufras cierta aflicción
cuya amargura prevalezca sobre la dulzura de la
bendición.
Los árabes daban a la alabanza el
nombre de “la conservadora”, esto es, la que conserva la
bendición. De hecho, la bendición está condicionada por
el agradecimiento de Al·lâh.
El Profeta SAAWS dice: “¡‘Âisha!
conserva las bendiciones de Al·lâh, se buena vecina de
las bendiciones de Al·lâh, pues es raro que vuelvan a
los dueños de un hogar que las tuvieron, una vez les
hayan abandonado”.
Lee lo que Al·lâh dice, lo que se
puede traducir como:
[¿Es que no has visto a quienes han
reemplazado el regalo de Al·lâh por ingratitud y han
situado a su gente en la morada de la perdición?
] (Sura de Ibrâhîm
"Abraham" : Aleya 28). y
[Pregunta a los hijos de Israel,
cuántos signos claros les dimos. Aquel que cambie la
bendición de Al·lâh, después de haberle llegado... Es
cierto que Al·lâh es Fuerte castigando. ]
(Sura de Al-Baqara "La
Vaca" : Aleya 211).
Si tú en vez de agradecerle a
Al·lâh una bendición, haces mal uso de ella,
empleándola en el pecado y sin alabar a Al·lâh
debidamente, te habrás hecho merecedor del castigo como
retribución.
El arma de Satanás es hacernos
dejar de agradecer o más bien ser ingratos, y como
Al·lâh dice, lo que se puede traducir como: ¨y a
la mayor parte de ellos no los encontrarás agradecidos.¨
Sura Al Aáraf, aleya 17.
Satanás te hace perder un don de
Al·lâh, y desear algo que no tienes en tus manos, y hace
de ti un desagradecido.
Veamos ejemplos de aquellos que
conocieron a El Muy Loable, Glorificado sea:
-
El Profeta SAAWS no dormía por
la noche para realizar los rezos nocturnos, hasta
que sus pies se agrietaban, y le decía a ‘Âisha:
¿acaso no debo ser un siervo grato?. Cada noche
decía: “Oh, Al·lâh, solo a Ti te debemos las
alabanzas, Tú eres la luz de los cielos y la tierra
y quien vive en ambos. A Ti solo te debemos las
alabanzas, eres El Eterno Sustentador de los Cielos
y la tierra y quien está en ambos. A Ti solo te
debemos las alabanzas, Tú eres la Verdad, Tu promesa
es verdad, tu encuentro es verdad, el Paraíso es
verdad, el Infierno es verdad, los Profetas son
verdad, y Mohammad SAAWS es verdad”
-
Alî Bnu Abî Tâleb,
cuando se le preguntaba: como estás, Príncipe de los
creyentes, contestaba: Me encuentro envuelto en
dichas, incapaz de agradecer tanto.
-
‘Omar Ibn Al Khatab, que Al·lâh
esté complacido con él, preguntaba a uno: ¿como
estás?. Cuando éste contestaba: estoy bien,
le volvía a preguntar: ¿como estás? Y si el
otro contestaba lo mismo, ‘Omar repetía la pregunta
hasta que el otro le contestaba: Estoy bien,
gracias a Al·lâh. Entonces ‘Omar le dijo: eso
es lo que quería escuchar. ‘Omar preguntaba la
gente por su estado para hacerles agradecer a Al·lâh.
-
Al·lâh Enaltecido sea, dice
sobre el Profeta Nûh “Noé”, que la paz sea
sobre él, lo que se puede traducir como:
¨Realmente Nûh “Noé” era un
siervo agradecido!¨. Sura Al Isra´, el Viaje
nocturno, aleya 3.
-
También, Al·lâh Enaltecido sea,
dice sobre el Profeta Ibrâhîm (Abraham), que la paz
sea sobre él, lo que se puede traducir como: ¨
Agradecido con Sus dones, Él lo escogió y lo guió a
un camino recto ¨. Sura la abeja, aleya 121.
¿Como alabar al Loable?
·
Primero: agradeciendo su
don en secreto.
·
Segundo: Alabar y
agradecer a Al·lâh en secreto y en público, y éste es un
grado más elevado de las alabanzas. Como en esa aleya:
“Y habla del favor que tu Señor te ha dado.”
Sura la Claridad de la mañana. Aleya 11.
·
Tercero: agradecer a
Al·lâh sus dones, a través de usarlos en hacer una
reforma de la tierra: “Familia de Dâwûd! ¡Obrad
con agradecimiento! Son pocos Mis siervos agradecidos.¨
Sura Saba, aleya 13. Hay que usar esos dones en
complacer a Al·lâh, y este es el nivel más elevado y más
querido a Al·lâh al alabarle.
Que la Paz, la Misericordia y las
Bendiciones de Al·lâh sean con vosotros.
Equipo de Dar Altarÿama-El convoy español
Al∙lâh=
significa Dios. Es el Nombre Más Grande que
ostenta el Único Creador que posee todos los
atributos propios de la divinidad, tal como fue
revelado en el Qor´ân.
(SAAWS):
Sal·la Al·lâhu Alayhi
Wa Sal·lam: Los Rezos y la Paz de
Al∙lâh
sean sobre él, que es explicada por los ulemas
como sigue:
Sal·la
Al·lâhu Alayhi:
significa que le cubra con su misericordia…El
motivo de traducirlo literalmente es porque
estas palabras son repetidas por los musulmanes
de todo el mundo, siguiendo el precepto divino
de decir esta expresión siempre que se mencione
al Profeta, en la llamada a la oración (Al Âdhân)
o en cualquier circunstancia, como veneración
concedida por Al·lâh a Su último Mensajero, que
ha sido enviado a toda la humanidad. Wa
sal·lam:
significa: y derrame Su Paz sobre él.
Fuente:
www.amrkhaled.net