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CHICOS, ¿HAN PENSADO ALGUNA VEZ EN QUE...? .1.
EL MUNDO DE LOS ANIMALES
HARUN YAHYA
Fuente: www.harunyahya.com
Primera publicación en turco: Estambul, Turquía, 2001.
Primera publicación en inglés: Reino Unido, Londres, julio de 2002.
Primera traducción en español: Buenos Aires, Argentina, Octubre de 2003.
Traductor del inglés al español: Abu Dharr Manzolillo.
INDICE
INTRODUCCIONLA ARDILLA : LA AMANTE DE LAS NUECES¡A LOS CONEJOS LES GUSTA LA ZANAHORIA!EL PERRO : UN ANIMAL LEALCORDERITOS BLANCOSLOS CABALLOS : NUESTROS AMIGOS MUY FIELESCABALLOS A RAYAS : LAS CEBRASLAS JIRAFAS : TORRES CON LUNARESLOS GRANDES ELEFANTESEL CIERVO : FAMOSO POR SUS ASTASLOS CANGUROS Y SUS “BOLSILLOS”UN DORMILON : EL COALALOS GATOS SON JUGUETONES Y MUY MIMOSOSEL LEON, REY DE LA JUNGLALOS TIGRES : GATOS SALVAJESLOS LLAMADOS OSOS PANDAS CON ANTIFACESA LOS OSOS LES ENCANTA LA MIELLOS GIGANTESCOS HABITANTES DE LAS NIEVES : LOS OSOS POLARESLAS FOCAS : NADADORAS VELOCES LOS PINGÜINOS EN SUS CHAQUETAS DE CEREMONIA EL FRAILECILLO PESCADOR LOS PAJAROS, MONARCAS DE LOS CIELOSLAS CIGÜEÑAS DE PATAS LARGASUN PAJARO ROSADO : EL FLAMENCOLOS CISNES Y SU GRAN ELEGANCIALOS AVESTRUCES (¡SON TAN GRANDES QUE NO PUEDEN VOLAR!) EL MAJESTUOSO PAVO REAL (EL AVE MAS GALLARDA DEL REINO ANIMAL)UN PAJARO QUE IMITA : EL LOROPATOS DE CABEZA VERDE LA MARIPOSA : UN MILAGRO MULTICOLOR LOS PECES QUE HABITAN LOS OCEANOS EL PEZ PAYASO EL DELFIN Y SU ROSTRO SONRIENTE LAS BALLENAS SON MUY GRANDES CONCLUSION
ACERCA DEL AUTOR
El autor, quien escribe bajo el seudónimo de HARUN YAHYA, nació en Ankara en 1956. Completó sus estudios primario y secundario en esa ciudad y luego cursó Bellas Artes en la Universidad Mimar Sinan de Estambul y Filosofía en la Universidad de Estambul. A partir del decenio de 1980 ha publicado muchos libros sobre política, temas relacionados con la fe y con las ciencias. El haber escrito obras muy importantes que ponen al descubierto la impostura de los evolucionistas, la invalidez de sus suposiciones y la tenebrosa vinculación entre el darwinismo y las ideologías sanguinarias como el fascismo y el comunismo, lo han hecho una persona muy conocida. El seudónimo del autor está constituido por los nombres ‘Harun’ –Aarón-- y ‘Yahya’ –Juan--, en memoria de ambos Profetas, quienes lucharon contra la infidelidad. El sello sobre la cubierta de los libros tiene un carácter simbólico y está vinculado a sus contenidos: representa al Corán (la última escritura) y al Profeta Muhammad, el último de los profetas. El propósito que anima al autor, bajo la guía del Corán y de la sunnah (literalmente significa: costumbre, práctica, uso, tradición), es refutar cada uno de los pilares fundamentales de las ideologías ateas, al punto que quienes argumentan en contra de la religión se queden mudos, sin saber qué decir. El sello del último de los profetas, quién obtuvo la sabiduría en su más elevado nivel y la perfección moral, es usado por Harun Yahya como un signo de la intención que lo anima frente a los que repudian la creencia religiosa. Todos los trabajos del autor se centran en un objetivo: comunicar el mensaje del Corán, animar a pensar sobre las cuestiones básicas relacionadas con la fe (como la presencia de Dios, Dios Uno y el Más Allá) y poner al descubierto los fundamentos endebles de las ideologías pervertidas de los sistemas ateos. Los lectores que disfrutan de los escritos de Harun Yahya son muchos y están en todo el mundo: desde la India a USA, desde Inglaterra a Indonesia, desde Polonia a Bosnia, desde España a Brasil. Algunos de sus libros están disponibles en inglés, francés, alemán, castellano, italiano, portugués, urdú, árabe, albanés, ruso, serbo-croata (bosnio), polaco, malayo, uygur, turco e indonesio. Esos libros han servido como un instrumento para que muchas personas recuperen su fe en Dios y para que otras profundicen el discernimiento sobre su certidumbre religiosa. La lógica que poseen, junto a su fácil comprensión y bello estilo, dan a estos trabajos un toque de distinción que conmueve a cualquiera que los lea o estudie. Dado que sus planteos son inobjetables, los escritos se caracterizan por su efectividad inmediata, los resultados definidos y la imposibilidad de refutarlos. Es muy difícil que quienes los lean con atención puedan seguir defendiendo con sinceridad la filosofía materialista, el ateísmo o cualquier otra ideología o doctrina pervertida. Y aunque sigan en alguna de esas posiciones negativas, lo harán solamente por motivos sentimentales, puesto que el autor las destruye desde sus mismas raíces. Todos los movimientos que niegan la religión quedan desde ahora derrotados ideológicamente gracias al conjunto de trabajos escritos por Harun Yahya. No cabe ninguna duda de que las características de esos libros son el producto de la sabiduría y lucidez del Corán. El autor sólo intenta servir como un modesto medio en la búsqueda, por parte de la gente, del sendero recto de Dios. Con la publicación de estos trabajos no se persigue ningún beneficio material. Considerando lo dicho, quienes animan a otros a leerlos prestan un servicio muy importante, pues “abren los ojos” y guían para ser más devotos servidores de Dios. Asimismo, sería injusto perder el tiempo y energía difundiendo otras obras que confunden, conducen al caos ideológico y no sirven para remover las dudas del corazón de los individuos.
Está claro que un libro que se dedica a hacer sobresalir la capacidad literaria del autor antes que apuntar a impedir que la gente pierda la fe religiosa, no podrá tener un gran efecto. Quienes dudan de que eso sea así, pueden ver fácilmente que el único objetivo que persiguen los libros de Harun Yahya es superar la incredulidad y diseminar los valores morales del Corán. El éxito e impacto de este servicio se manifiesta en la convicción que adquieren los lectores. Hay algo que debería tenerse en cuenta: la principal razón para que continúen la crueldad, los conflictos y los grandes atropellos que sufre la mayoría de la población del orbe, estriba en el dominio ideológico de la incredulidad. Dicha situación puede finalizar solamente con la derrota ideológica de la misma, haciendo conocer las maravillas de la creación y la moral coránica de modo que se viva según ésta. Teniendo en cuenta la situación del mundo de hoy día, que conduce a la gente a una espiral de violencia, corrupción y enfrentamientos, la tarea de moralización indicada debe hacerse con premura y de manera efectiva, pues de otro modo puede ser demasiado tarde. No es exagerado decir que el conjunto de escritos de Harun Yahya ha asumido esa tarea primordial. Si Dios quiere, estos libros serán un medio a través de los cuales los seres humanos del siglo veintiuno obtendrán la paz, la justicia y la felicidad prometidas en el Corán. Sus obras incluyen: Judaísmo y Masonería, Masonería Mundial, Terrorismo: El Ritual del Mal, Cábala y Masonería, El Nuevo Orden Masónico, Los Caballeros Templarios, El Islam Denuncia el Terrorismo, La 'Mano Secreta' en Bosnia, Los Kurdos: la Carta Secreta de Israel, El Comunismo al Acecho, Fascismo: La Ideología Sangrienta del Darwinismo, Los Desastres Que Produjo el Darwinismo a la Humanidad (disponible versión en castellano), Entre Bastidores del Terrorismo, Entre Bastidores del Holocausto, La Política Opresiva de China Comunista y la Situación en Turkestán Oriental, Palestina: La Solución, Las Normas Eticas del Corán, El Invierno del Islam y la Primavera Esperada, Declaración de Fe (1, 2 y 3), Un Arma de Satanás: el Romanticismo, La Luz del Corán Destruyó el Satanismo, Los Ultimos Tiempos y Sus Signos en el Capítulo del Corán “La Vaca”, Signos del Ultimo Día y la Bestia de la Tierra, Realidades (1 y 2), El Mundo Occidental se Vuelve Hacia Dios, El Engaño del Evolucionismo (disponible versión en castellano), Respuestas Precisas a los Evolucionistas, Las Equivocaciones de los Evolucionistas, El Corán se Opone al Darwinismo, La Epoca de Oro, Pueblos Desaparecidos (disponible versión en castellano), El Arte del Color de Dios, La Verdad de la Vida en Este Mundo, Signos en los Cielos y en la Tierra Para las Personas de Entendimiento (disponible versión en castellano), El Profeta Moisés, El Profeta Yusuf, El Profeta Muhammad (BP), El Profeta Salomón, La Gloria Está por Todas Partes, La Importancia de las Evidencias de la Creación, La Pesadilla del Incrédulo, Conocimiento de la Verdad, La Eternidad Ya Ha Comenzado, La Eternidad y la Realidad del Destino, Materia: Otro Nombre de la Ilusión, El Hombrecito en la Torre, El Islam y la Filosofía del Karma, La Magia Negra del Darwinsimo, La Religión del Darwinismo, El Colapso de la Teoría de la Evolución en 20 Preguntas, La Ingeniería de la Naturaleza, El Atolladero del Evolucionismo I (Enciclopédico), El Atolladero del Evolucionismo II (Enciclopédico), Dios es Conocido a Través de la Razón, El Corán Guía el Camino de la Ciencia, El Verdadero Origen de la Vida, Conciencia en la Célula, La Tecnología Imita a la Naturaleza, Una Retahíla de Milagros, La Creación del Universo (disponible versión en castellano), Los Milagros en el Corán, El Diseño en la Naturaleza, Autosacrificio y Modelos Inteligentes de Comportamiento entre los Animales, El Fin del Darwinismo, Nunca Defienda la Ignorancia, El Milagro Verde: La Fotosíntesis, El Milagro del Atomo, El Milagro en la Célula, El Milagro del Sistema Inmune, El Milagro en el Ojo, El Milagro de la Creación en los Vegetales, El Milagro en la Araña, El Milagro en el Mosquito, El Milagro en la Abeja, El Milagro en la Hormiga, El Milagro de la Semilla, El Milagro en la Termita, El Milagro de la Hormona, El Milagro del Cuerpo Humano, El Milagro de la Creación del Ser Humano, El Milagro de la Proteína, El Milagro del Olfato y del Gusto, El Milagro del Micromundo, Los Secretos del ADN. Los libros para niños del autor son: Maravillas en la Creación de Dios, El Mundo de los Animales, La Gloria en los Cielos, Criaturas Asombrosas, Aprendamos Nuestro Islam, Los Milagros en Nuestros Cuerpos, El Mundo de Nuestras Amiguitas Las Hormigas, Los Panales Perfectos de las Abejas, Constructores Hábiles de Diques: Los Castores, ¡Chicos, Darwin Mentía! Otros trabajos del autor sobre temas coránicos incluyen: ¿Nunca Pensaron Acerca de la Verdad?; Devotos de Dios; Abandono de la Sociedad de la Ignorancia; La Real Morada de los Creyentes, El Paraíso; Valores Morales en el Corán; Conocimiento del Corán; Index del Corán; La Emigración por la Causa de Dios; Referencia a los Hipócritas en el Corán; Los Secretos del Hipócrita; Los Nombres de Dios; La Comunicación del Mensaje y la Discusión en el Corán; Conceptos Básicos en el Corán; Respuestas Desde el Corán; Muerte, Resurrección, Infierno; La Lucha de los Mensajeros; El Enemigo Jurado del Ser Humano: Satanás; La Mayor Difamación, La Teoría de la Evolución; Idolatría, la Religión del Ignorante; La Arrogancia de Satanás; El Rezo en el Corán; La Importancia de la Conciencia en el Corán; El Día de la Resurrección; No Olvidar Nunca; Desprecio de los Dictámenes Coránicos; Abandono de la Sociedad de la Ignorancia; La Importancia de la Paciencia en el Corán; Conocimiento General a Partir del Corán; Rápida Adhesión a la Fe (partes 1, 2 y 3); Razonamiento Imperfecto del Incrédulo; La Fe Perfeccionada; Lo Que Dicen Nuestros Mensajeros; La Compasión de los Creyentes; El Temor a Dios; La Pesadilla del Incrédulo; El Profeta 'Isa (Jesucristo) Vendrá; Las Bellezas de la Vida Presentadas por el Corán; Un Conjunto de las Bellezas de Dios (partes 1, 2, 3 y 4), La Iniquidad Llamada "Burla"; El Secreto de la Prueba; La Verdadera Sabiduría Según el Corán; El Combate con la Religión de la Irreligión; La Escuela de Yusuf; La Alianza de Dios; La Difamación Contra los Musulmanes a lo Largo de la Historia; La Importancia de Seguir la Buena Palabra; ¿Por Qué Te Autoengañas?; El Islam: La Religión de la Tranquilidad; el Entusiasmo y el Vigor Según el Corán; El Ver el Bien en Todo; ¿Cómo Interpreta al Corán el Ignorante?; Algunos Secretos del Corán; El Valor de los Creyentes, Confiados en el Corán, La Justicia y la Tolerancia en el Corán, Pilares Fundamentales del Islam, Los Que Desatienden el Corán, El Corán Como Guía, Una Amenaza al Acecho: La Negligencia, La Sinceridad en el Corán, La Religión de las Personas Devotas, Los Procedimientos del Mentiroso Según el Corán; Meditación Profunda (disponible versión en castellano); Antes de Lamentarse (disponible versión en castellano).
AL LECTOR
Las cuestiones relacionadas con la fe se tratan, en todas las obras del autor, a la luz de los versículos coránicos, y se invita a la gente a aprender de ellos y a vivirlos. Todos esos temas referidos a los versículos de Dios se explican de una manera tal que no dejan ningún lugar a la duda o al cuestionamiento en el pensamiento del lector. El estilo empleado, llano, abierto y fluido, asegura que todos, de cualquier edad o grupo social, puedan comprender los escritos de Harun Yahya fácilmente. Esta manera lúcida y efectiva de los relatos los hace de rápida lectura. Incluso algunos que rechazan la espiritualidad con rigor son influenciados por la veracidad de los hechos a los que se hace referencia en los libros de Harun Yahya, y no pueden refutar sus contenidos. Este libro y todos los otros trabajos del autor pueden ser leídos por una persona sola o por grupos de estudio, para debatirlos. Esto último será más beneficioso gracias al intercambio de reflexiones y experiencias. Además, será un gran servicio a la religión contribuir a la presentación y lectura de este libro, el cual está escrito solamente para el agrado de Dios. Todos los escritos de Harun Yahya son muy convincentes. Por esta razón, uno de los métodos más efectivos de comunicar la religión a otras personas, es impulsarlas a leerlos. El lector también dispone al final de este trabajo de los títulos y comentarios de otras obras que le permitirán apreciar la valiosa fuente del material de todo lo relacionado con la fe. Su lectura también será, sin lugar a dudas, provechosa y placentera.
INTRODUCCION
Queridos chicos: En este libro descubriremos las maravillas de la creación en los seres vivientes que nos rodean. A través de estas páginas emprenderán un animado viaje en compañía de muchos animales que les sorprenderán con sus peculiaridades muy interesantes. A medida que las lean podrán comprobar que es Dios Quien ha creado todo lo viviente de la mejor manera, como manifestación de Su poder, conocimiento y belleza infinitos. Si les preguntamos si conocen a todos los animales, es casi seguro que nos responderán que solamente están enterados de algunos. Pero, ¿saben cómo viven, cómo se cuidan y cómo buscan su alimento? Lo más probable es que no conozcan estos detalles. No se preocupen. Aquí aprenderán mucho de todo eso y nos parece que se asombrarán al darse cuenta de las capacidades y cualidades que Dios les dio. Sabrán más sobre algunos a los que ya los tienen vistos y descubrirán la vida extraordinaria de otros de los que posiblemente no oyeron hablar nunca. Estamos convencidos de que les gustará mucho y que se asombrarán cuando lean cómo realizan sus tareas. Verán e irán conociendo a los avestruces, los corredores más rápidos del mundo; a los tigres, rapidísimos en tramos cortos; a las ardillas de dientes incisivos; a los admirables pavos reales. Como se pueden imaginar, los animales que vamos a estudiar aquí son solamente algunos de la inmensa cantidad existente. No debemos olvidar que lo que Dios quiere es que seamos conscientes de Su poder y arte infinitos que encierra la creación, para que reconozcamos que El ha creado todo, que El es el dueño de todo lo viviente y que al contemplar la belleza que hay en todo lo que El hizo para placer nuestro, Le amemos y Le estemos agradecidos. La creación del universo, es decir, de los animales, de las plantas, del día, de la noche y de lo primero a lo último que nos rodea, nos sirve para una sola cosa esencial: ser capaces de apreciar la obra sublime y perfecta de Dios; ser capaces de decir, “¡Cuánta bondad hay en todo lo que Dios hace!”. Eso es lo que encontrarán en este libro. ¿Están dispuestos a iniciar este viaje? ¡Entonces den vuelta la página y embárquense en el mundo de los animales, algo realmente maravilloso!
LA ARDILLA : LA AMANTE DE LAS NUECES
Vamos a enterarnos de algunas de las cualidades que Dios otorgó a las ardillas. Estamos seguros de que tanto a ustedes como a sus amigos les sorprenderá lo que leerán acerca de estos bichitos amorosos. Normalmente viven en los bosques de Europa y los EEUU. Miden unos veinticinco centímetros de largo desde el hocico hasta el comienzo de la cola, en tanto que ésta, ancha, recta y peluda, tiene casi la misma longitud. Seguramente Dios las hizo así con un propósito, pues El no hace nada por juego o distracción: gracias a esa cola larga pueden saltar de un árbol a otro sin perder el equilibrio. Las uñas pequeñas y agudas les permiten treparse a los árboles sin dificultad, correr por las ramas, colgarse patas arriba y moverse en esa posición. Pueden saltar de una rama a otra que está a cuatro metros de distancia, para lo cual extienden sus miembros anteriores y posteriores y planean. La cola achatada les sirve para mantener el equilibrio y como timón. Incluso pueden lanzarse en caída libre desde una altura de nueve metros y aterrizar suavemente sobre sus cuatro patas. Lo dicho y otras cosas, como la de lanzarse desde lejos a una rama pequeña y caer justo allí como si fuesen trapecistas, nos lleva a preguntarnos sobre la forma en que manejan su cuerpo para lograrlo. Lo que hacen es usar muy bien sus miembros posteriores, realizar un cálculo visual perfecto de la distancia a cubrir, valerse de sus garras y de su cola para mantener el equilibrio. Pero, ¿pensaron alguna vez quién les dio esas capacidades y les enseñó a usarlas? Puesto que es imposible que una familia de ardillas determine un sistema métrico que les permita medir la altura de los árboles y el largo y diámetro de las ramas, ¿cómo hacen para realizar ese cálculo mientras saltan de un lado a otro? Además, ¿por qué nunca se dañan ni quedan inválidas con movimientos tan veloces y continuos? Sin lugar a dudas, es Dios Quien las creó y les enseñó a hacer uso de las habilidades con las que las dotó. En consecuencia, tienen los atributos y destrezas necesarios para alcanzar las nueces, avellanas, castañas y piñones, es decir, los frutos que crecen en las partes elevadas de los árboles. Dios les dio esas habilidades para que puedan obtener el tipo de alimento que necesitan. Como en el invierno les es difícil encontrar su comida, en el verano la recogen y la guardan para pasar los largos meses de frío. Pero al recoger su alimento son muy cuidadosas. No almacenan lo que se echa a perder con facilidad sino solamente los alimentos durables, como las nueces, castañas, avellanas y piñas. Es Dios Quien les da ese conocimiento al nacer y les capacita para que obtengan su comida. Aquí testimoniamos uno de los atributos de Dios: El es ar-Razzaq (el Proveedor), es decir, es el Uno Que provee de sustento permanentemente a todo lo viviente que El ha creado. Las ardillas ocultan el alimento en distintos lugares. En el invierno y gracias al buenísimo sentido del olfato que poseen, detectan su olor aunque esté cubierto por treinta centímetros de nieve. Después lo acarrean a sus nidos donde hay más de un depósito. Pero también se les pasan desapercibidos algunos lugares o ya no les interesan, porque Dios lo dispuso así. Es decir, esos frutos enterrados se convertirán en nuevos árboles. Como la mayoría de los demás animales, tienen métodos para comunicarse entre ellas. La ardilla roja, por ejemplo, al ver a un enemigo, bate la cola y produce ruidos estrepitosos para que el resto de sus familiares lo sepan. La cola les sirve también de timón, para cambiar la dirección de su desplazamiento. Asimismo, los bigotes juegan un papel muy importante en el equilibrio y para percibir de noche lo que tienen a su alrededor. ¿Sabían que algunas ardillas también vuelan? Todas las especies “voladoras” australianas viven en los árboles y miden entre cuarenta y cinco y noventa centímetros de longitud. Realizan grandes saltos de un árbol a otro. Lo hacen como planeadores, sin alas pero con “membranas voladoras”. La llamada “planeadora de azúcar” es un tipo de ardilla con una membrana que se extiende desde los miembros anteriores a los posteriores, posee un cuerpo estrecho y pelos como borlas. En algunas especies la membrana está constituida por piel sarrosa que se extiende hasta los tobillos de los miembros anteriores. Pueden llegar a cubrir un trayecto de 30 metros de un solo salto. En algunos casos pueden realizar seis planeos sucesivos y cubrir una distancia de 530 metros. Si se quedan quietas se les enfría el cuerpo muy rápidamente y pueden congelarse, por lo que les resulta peligroso quedarse dormidas. Pero Dios les ha creado varios mecanismos de protección para las situaciones desfavorables. Por ejemplo, durante el sueño envuelven y aprietan bien la cola contra el cuerpo, como si fuese una casaca, y eso evita que se congelen los días invernales.
¡A LOS CONEJOS LES GUSTA LA ZANAHORIA!
¿Quieren aprender un poco más sobre los conejos, esas criaturas adorables que a veces se las tiene como animales domésticos? Al pensar en ellos casi siempre se nos viene a la memoria su pelo blanco como la nieve, que comen zanahorias y que nos resulta agradable acariciarlos. Veamos ahora algunas otras cosas propias de estos animalitos. Al aproximarnos a uno de ellos nos damos cuenta de lo rápido que corre para escaparse. ¿Sabían que sus grandes orejas les sirven para percibir a sus enemigos aunque estén ocupados comiendo? Por eso es muy difícil acercarse a un conejo sin que se dé cuenta. Los adultos llegan a medir de cincuenta a setenta centímetros de longitud. Sus miembros posteriores son más largos y fuertes que los anteriores, lo que les permite correr a 60 – 70 km/h y dar saltos en largo de seis metros. Se mueven más rápidamente que un automóvil en la ciudad. Todos los conejos poseen esas características al nacer. Dios los creó como rápidos corredores para que puedan escapar fácilmente de sus perseguidores. ¿Qué respuesta nos daría un conejo si le preguntásemos cuál es la comida que más le gusta? ¡Si! ¡Acertaron! Por cierto que dirá: ¡“las zanahorias”! (Recordemos que esta hortaliza es muy buena para la vista). ¿Sabían también que estos animalitos viven por lo general en las conejeras que cavan en el suelo y que las zanahorias se desarrollan por debajo de la superficie de la tierra? Como se pueden dar cuenta, este vegetal fue creado de la manera más apropiada para servir a la necesidad de los conejos. Dios ha hecho todo de la mejor manera. Por ejemplo, la naranja que nosotros comemos en invierno está constituida por gajos para facilitar su división y porque de ese modo retiene mejor la vitamina C. Volvamos a los conejos. Pueden roer fácilmente las zanahorias con sus dientes frontales, los cuales siempre están creciendo y les dan esa apariencia tan simpática. Dios les ha dotado, asimismo, con otras características. En las regiones frías casi todos ellos son de color blanco, lo cual les permite pasar desapercibidos en la nieve u ocultarse sin problemas. Los silvestres son algo más grandes que los de criadero. El del desierto norteamericano tiene orejas de mayores dimensiones pues eso le permite refrescar mejor su cuerpo. La mayoría de los animales viven en territorios demarcados --como nosotros con la familia en nuestras casas-- y evitan meterse en el que no les pertenece. Un método para delimitar la zona correspondiente es señalarlo con una “esencia”. Las gacelas, por ejemplo, depositan una sustancia parecida a la brea sobre las ramas largas y finas de los árboles y sobre el pasto. La segregan a través de una glándula ubicada debajo de los ojos. De esa forma se enteran otras gacelas que dicha parcela está ocupada. El reno tiene las glándulas secretoras en los extremos de los pies posteriores, mientras que en los conejos se ubican en el mentón.
Como pueden ver, Dios ha creado a los animales con características importantes e interesantes. Al conocerlas nos hacemos conscientes de la creación perfecta de Dios. Al recordar que El es nuestro Creador debemos demostrarle nuestro agradecimiento. El nos ha ordenado que tengamos en cuenta Sus bendiciones y que Le seamos agradecidos. En un versículo del Corán Dios nos informa que premiará a los agradecidos: ...Y retribuiremos a los agradecidos (Corán, 3:145).
¡Chicos! Deben acordarse de agradecer a Dios las bendiciones y bellezas de las que están rodeados.
EL PERRO : UN ANIMAL LEAL
Los perros son más astutos que la mayoría de los animales y son fáciles de educar. Bien entrenados pueden ser usados como guardianes y son capaces de reducir a una criatura cinco o seis veces más grande. En momentos de peligro pueden convertirse en brutalmente salvajes con los extraños, sin representar ningún peligro para sus dueños. Frente a una amenaza arriesgan su vida para proteger la de su amo, al que nunca abandonan. La existencia de cientos de especies de perros de distintos tamaños y colores es uno de los signos sin par de la cr eación de Dios. En el Corán se relata la creación singular de nuestro Señor: Creador de los cielos y de la tierra. ¿Cómo iba a tener un hijo si no tiene esposa, si lo ha creado todo y lo sabe todo? Ese es Dios, vuestro Señor. No hay más dios que El. Creador de todo. ¡Servidle, pues! El vela por todo (Corán, 6:101-102). Supongamos que nunca vieron un perro y alguien les pide que dibujen uno. ¿Lo pueden hacer? Por supuesto que no, ya que no saben de qué se trata. Es necesario haberlo visto antes, o por lo menos tener una foto o dibujo del mismo, para poder copiar su figura sobre un papel o crear otra. Y es Dios Quien nos provee de todos los ejemplos. Por ejemplo, los aviones son diseñados tomando como base la forma de volar de los pájaros. Los robots son imitaciones de las estructuras corporales de distintas criaturas. Pero Dios crea incontables especies sin imitar nada: los pingüinos del polo sur, los leones reyes de la sabana, los delfines, las mariposas, los pájaros, las abejas, etc. En resumen, Dios es el creador de todo. Es Dios Quien ha dado a todos los perros las características físicas que exhiben y que les diferencian de otras criaturas. Por ejemplo, el perro tiene 42 piezas dentales, es decir, 10 más que los humanos. Gracias a eso puede triturar y romper el alimento, especialmente los huesos, sin dificultad. Además, debido a la creación especial de sus ojos, puede ver en la penumbra mejor que nosotros y observar objetos que se mueven bastante lejos. Por otra parte, sus oídos abarcan frecuencias que superan nuestro umbral de audición y perciben los ruidos desde una distancia cuatro veces superior a la posible para los humanos. Por ejemplo, nosotros no advertimos el sonido extremadamente agudo del silbato que usan los entrenadores para darle órdenes a los perros. Su sentido del olfato es muy bueno y superior al humano pues en el cerebro tienen el centro olfativo cuarenta veces más desarrollado que nosotros. Si van a buscar la presa abatida por el cazador es porque perciben su olor y la rastrean aunque se encuentre a varios kilómetros de distancia. Por otra parte, el perro entrenado para la pesquisa puede ubicar a una persona con sólo oler una ropa que haya tenido puesta. Asimismo, los San Bernardo, gracias a la sensibilidad de su olfato, pueden detectar fácilmente y rescatar a gente herida o en apuros enterrada bajo la nieve. Este solo hecho es un milagro de Dios en los perros. Por supuesto, la nariz también les sirve para respirar, filtrar el aire, entibiarlo, humedecerlo y dirigirlo a los pulmones. A diferencia de los seres humanos, no sudan para regular la temperatura corporal porque carecen de glándulas sudoríparas. La regulación térmica es manejada por el sistema respiratorio. Al aumentar la temperatura ambiente les aumenta la temperatura corporal y para disminuirla jadean con la lengua afuera. Así expelen el calor interno. Nosotros sudamos apenas corremos un poco, pero el perro no lo hace aunque corra durante horas. Ahora que saben esto no tienen que asustarse cuando ven a los perros jadear los días de mucho calor. También podrán observar que normalmente tienen el pelo suave y brillante. Eso se debe a las glándulas oleosas que tienen en la piel. También disponen de otros sistemas especiales que impiden que se les gasten o dañen las patas o se les estropeen las garras. Como pueden ver, nuestro Señor ha resuelto todos los problemas, hasta los más pequeños, por medio de distintos mecanismos u órganos, en una medida dispuesta por El, pues ha diseñado todo con una armonía perfecta y ha equipado a todas las criaturas con las capacidades necesarias. Estos ejemplos nos llevan a comprobar y a pensar en Su arte en la creación.
CORDERITOS BLANCOS
Ustedes ya habrán visto que todos los corderitos tienen un rostro lindo e inocente, igual que sus madres las ovejas. ¿Sabían que entre madre e hijos hay un relación muy fuerte? Se establece desde el principio porque cuando la mamá amamanta a las crías las huele, les pasa la lengua y después no acepta a ningún otro corderito que no tenga ese olor y ese sabor, de los cuales no se olvida nunca. ¡Esto es algo asombroso! Esa distinción la tiene que hacer apenas pare porque de lo contrario puede perder a la cría confundida entre otras. Por supuesto, es Dios Quien inspira a la mamá esa forma de actuar. ¿Saben por qué las ovejas no se mojan cuando llueve? Sucede que su piel es una capa de grasa suave que le impermeabiliza el pelo, el cual se enrula y mantiene seco, aún en los días de lluvia. Una de las características más importantes de los ovinos es que son rumiantes. ¿Saben que es ser rumiante? Les contaremos. Algunos animales que se alimentan de vegetales tienen el estómago dividido en cuatro compartimientos: 1) panza, rumen o herbario, 2) redecilla, 3) libro o bonete y 4) cuajar. Lo que ingieren va a la panza o rumen donde lo ablandan un poco, de allí lo vuelven a la boca --pasando por la redecilla y libro-- para masticarlo por segunda vez y dejarlo mejor preparado y por último lo envían al cuajar, donde ya lo usan como alimento. Este proceso se llama “rumiadura”. Dios les ha dado a algunos animales esa capacidad para un mejor aprovechamiento de lo que comen. Los ovinos son muy útiles para nosotros. Su leche es muy usada en muchas partes del mundo, pues contiene bastantes sustancias alimenticias y nos sirve para hacer yogurt, queso y otras cosas muy buenas para la salud. Además, la lana se aprovecha para la confección de ropas e hilados.
El Corán --el Libro que Dios ha enviado a toda la humanidad-- nos informa de los beneficios que obtiene el hombre de estos animales: Dios ha hecho de vuestras viviendas un lugar habitable. De la piel de los rebaños os ha hecho tiendas, que encontráis ligeras al trasladaros o al acampar. De su lana, de su pelo y de su crin, artículos domésticos para disfrute por algún tiempo (hasta que uno muere) (Corán, 16:80).
...Os damos a beber... una leche pura, grata a los bebedores (Corán, 16:66).
Como mencionan estos versículos, de las ovejas y corderos obtenemos muchas cosas beneficiosas. Deberíamos ser agradecidos con Dios, Quien los creó para nosotros.
LOS CABALLOS : NUESTROS AMIGOS MUY FIELES
¿Sabían que después del perro nuestro amigo más fiel es el caballo? Después de estar domesticado nunca abandona a su dueño si a éste le pasa algo. Hay más de veinticinco tipos y todos ellos nos pueden transportar grandes distancias sin agotarse. Son los animales que más nos han ayudado a lo largo de la historia. Los automóviles, de los que vemos miles por todas partes y para los que se construyeron muchas carreteras, están a nuestra disposición solamente desde el siglo XIX. Al nacer sus bisabuelos prácticamente no existían. Para el transporte se usaban animales, especialmente caballos. ¿Sabían que mirándoles los dientes se puede saber cuántos años tienen? Lo que pasa es que al masticar el pasto con la arena o tierra que se les pega, las piezas dentales se desgastan gradualmente y esa disminución mide la edad. Muelas y dientes están profundamente enraizados en las mandíbulas y mientras van reduciendo su tamaño la parte que está adentro del hueso va saliendo a la superficie. Cuando el animal es muy viejo el extremo de la raíz de la pieza dental queda casi al borde de la superficie. Cada una de ellas puede gastarse unos 2,5 centímetros antes de perder la capacidad de masticar. Piensen por un momento que si nuestro Señor no hubiese dispuesto esto, los caballos habrían perdido rápidamente sus dientes y muelas y habrían quedado inservibles enseguida. Otra capacidad importante que nuestro Señor dio a los caballos es el pelo, pues le sirve como termostato, es decir, para regular su temperatura corporal, que siempre debe ser de 38°C. Por eso es que crece en invierno y en verano lo muda o pierde. Otra característica interesante del caballo es que duerme parado. ¿Cómo hace para no caerse? Dios ha hecho que al dormir, a diferencia de los humanos, trabe esas piernas que durante las horas de trabajo llevan pesadas cargas y realizan movimientos extraordinarios. Además carece de clavícula, por lo que puede dar pasos muy largos en tanto que un mecanismo hueso-músculo en sus miembros hace que cuanto mayor velocidad desarrolle más disminuya el consumo de energía y aumente la capacidad de desplazamiento. El principio por el que funciona este mecanismo es similar al de la caja de transmisión en los automóviles, lo que le permite ir a una velocidad mayor empleando una potencia menor y viceversa.
Ahora bien, ¿por qué los caballos disponen de esas habilidades que no le son imprescindibles para vivir? La respuesta es obvia: están para servir al ser humano. En otras palabras, Dios los ha creado así para que nos sean útiles. En el Corán se enfatiza que El creó a los animales para que estén al servicio del hombre: Y los rebaños los ha creado para vosotros. Hay en ellos abrigo y otras ventajas y os alimentáis de ellos. Disfrutáis viéndolos cuando los volvéis por la tarde o cuando los sacáis a pastar por la mañana. Llevan vuestra carga a países que no alcanzaríais sino con mucha pena. Vuestro Señor es, en verdad, manso misericordioso. Y los caballos, los mulos, los asnos para que os sirvan de montura y de ornato. Y crea otras cosas que no sabéis (Corán, 16:5-8).
CABALLOS A RAYAS : LAS CEBRAS
A primera vista las cebras nos recuerdan a los caballos. También tienen pelo al que llamamos “crin” o melena. La estructura del cuerpo es muy similar a la del caballo y corre tan ligeramente como éste. Pero su apariencia es notablemente distinta. Como se pueden dar cuenta, la diferencia está en sus rayas bastante rectas que le cubren desde la cabeza a las patas. En cada cebra las rayas son distintas, como las huellas dactilares en las personas. Es decir, las rayas pasan a ser el documento de identidad de cada animal. Las verticales resultan un importante elemento de defensa porque cuando la manada está junta los tigres y leones no pueden distinguir a una de otra y les resulta difícil elegir el individuo a atacar. Los elementos de supervivencia esenciales de las cebras son dos: el agua y el pasto. A veces deben recorrer unos 50 kilómetros para encontrarlos. Pero a la noche retornan al mismo lugar porque siempre viven en el mismo territorio elegido una vez. ¿Sabían que a las cebras les gustan los baños de polvo? Eso se debe a que les permiten quitarse de encima los parásitos que tienen en la piel. También unos pájaros marrones se comen las garrapatas que les encuentran allí. De ese modo evitan la sarna, la picazón y no se enfermarse. Como ven, nuestro Señor, Quien planea y controla la vida de todas las criaturas, hace que unas se ayuden a otras. También es El Quien hace que alrededor de media hora después de nacer una cebrita ya se ponga de pie, empiece a caminar, aunque aún tambaleándose, y se amamante con la leche color rosado de la madre que le protege de enfermedades y le asegura un correcto funcionamiento intestinal. Las cebras, como las demás criaturas, están bajo la protección de Dios y equipadas con mecanismos de defensa que El les enseñó a usarlos. El primer mecanismo lo constituyen sus órganos sensoriales: vista, oído, olfato. Se valen de ellos para percibir el acecho de sus predadores y alejarse del lugar enseguida. Apenas empiezan a correr ya lo hacen a gran velocidad. El segundo es el empleado cuando la manada duerme: una o dos de ellas se quedan despiertas y atentas para advertir a las demás en caso de amenazas. Las tácticas defensivas que usan son similares a las de los humanos. Es interesante saber que viven en una gran armonía entre ellas y se dividen las tareas. No cabe ninguna duda de que es Dios Quien creó a las cebras, hizo que se reúnan en manadas, les provee de su alimento y les da la organización que exhiben. Si no fuese así, nadie podría explicar porqué algunas se sacrifican permaneciendo despiertas toda la noche para proteger al resto. Por otra parte, Dios ha enseñado a las recién nacidas una táctica de defensa muy simple. Todo lo que tienen que hacer es permanecer junto a su madre porque es imposible que vean al enemigo oculto o corran rápido. Y así se comportan hasta que se desarrollan un poco más. Si no es Dios quien les inspira este procedimiento, ¿cómo pueden saber que hay predadores al acecho y que el lugar más seguro es cerca de sus madres? La mayoría de las cebras viven en pastizales abiertos donde no hay mucha posibilidad de ocultarse. En consecuencia, necesitan moverse rápidamente para permanecer vivas. Efectivamente, toda su estructura corporal --por ejemplo, huesos livianos y fuertes-- está diseñada para cubrir esa necesidad: tienen patas vigorosas y corren largas distancias sin agotarse ni disminuir la velocidad. Como es un animal que necesita beber agua a menudo, en las regiones donde escasea se vale de su agudo sentido del olfato y hace un pozo para llegar al agua fresca. En momentos de peligro las adultas empujan a las jóvenes al centro de la manada para protegerlas y al correr las mantienen siempre en esa posición, cerca de sus madres.
LAS JIRAFAS : TORRES CON LUNARES
A menudo llegan a cinco o seis metros de altura y se puede encontrar una semejanza entre ellas y la torre manchada. La parte más larga del animal es el cuello, lo que le permite alcanzar las ramas elevadas y alimentarse con brotes y hojas. A las plantas espinosas no las mastica sino que las manda directamente a su estómago de cuatro compartimientos. Después regurgita el vegetal a la boca y lo mastica. Por último lo vuelve a tragar y lo envía a otro compartimiento estomacal. Pero en este proceso hay algo interesante. En el viaje desde el estómago a la boca el alimento debe recorrer cuatro metros. ¿Cómo hace para “subir”? Vamos a explicarlo. El animal tiene en el cuello un mecanismo elevador que lo hace posible. Pero está claro que la jirafa no pudo haber pensado: “para que lo que trague me sirva de alimento lo debo devolver a la boca para masticarlo, por lo que debo construir un mecanismo elevador”. Además, ese mecanismo no pudo haberse formado por casualidad. Por cierto, ustedes se reirían si alguien les dijera: “Me fui a una zona desierta donde hace mucho tiempo dejé algunos materiales de construcción y para mi sorpresa encontré un edificio terminado. No me queda ninguna duda de que como por allí nunca pasaron otros seres humanos, la lluvia, la nieve y el sol trabajaron juntos a lo largo de años para levantarlo”. Lo más probable es que después de escuchar algo así consideren que la persona que lo dijo está mal de la cabeza y le tengan lástima. También es irrazonable pensar que de esa manera se hizo el mecanismo de elevación en el cuello de la jirafa. Es decir, no pudo pasar a existir de manera casual. Por otra parte, no se trata de una construcción inerte hecha de rocas, barro y ladrillos. Estamos hablando de algo que existe en un ser vivo que corre, siente hambre y tiene descendencia. ¿Es posible que ese mecanismo elevador se haya formado en la jirafa de manera accidental? ¿Es posible que la casualidad le haya dado a este animal un cuello largo equipado con un mecanismo eficaz? Por supuesto que no. Es obvio que todo lo que la jirafa requería le fue dado por Dios, Quien creó las estructuras de su boca y estómago de modo que pueda comer plantas espinosas sin dificultades. La manera en que duerme también nos recuerda la existencia de Dios, Quien la creó. Dirige el cuello hacia el cuerpo y pernocta, parada posición que mantiene a lo largo de casi todo el sueño. Pero las jirafas no duermen todas a la vez sino que algunas se quedan despiertas para alertar a las que reposan frente a cualquier amenaza. Este esfuerzo solidario de algunas jirafas en consideración del resto del grupo nos muestra el control que tiene Dios sobre las mismas. Veamos ahora cómo beben agua. Probablemente son pocos los que han prestado atención sobre la forma en que se inclinan sin dificultad para hacerlo. Pero nuestro Señor, el Creador de todo, quiere que tengamos en cuenta el sistema tan delicado que lo permite. En primer lugar, aclaremos que en su etapa de bebé les espera un serio problema a estas criaturas de cuellos largos. Es muy importante y para comprenderlo debemos tener presente algo. ¿Se acuerdan ustedes de lo que les sucede cuando intentan permanecer cierto tiempo cabeza abajo? ¡Exacto! El rostro se les pone rojo porque la sangre, que se amontona en la cabeza debido a la fuerza de gravedad, presiona las venas. Eso mismo le sucede a la jirafa cuando se inclina para tomar agua, pues debe descender muy mucho la cabeza y entonces la presión es muy grande allí. Si un ser humano fuese sometido a una presión sanguínea como la que sufre la jirafa en esa situación, le estallaría el cerebro. Entonces, ¿cómo hace este animal para beber sin que se le produzca un derrame cerebral? Dios, el Creador del espacio, del cielo, de la Tierra y de todas las criaturas, ha dotado a la cabeza de la jirafa con un sistema especial: en las venas que pasan por allí existen pequeñas válvulas que impiden que la presión aumente. ¿Han pensado alguna vez por qué las jirafas tienen manchas en el cuerpo? Esa estética, en armonía con los pastizales, dificulta mucho que sus enemigos las distingan del ambiente circundante. A pesar de ser tan grandes se pueden ocultar del león, el rey de la sabana, su peor enemigo. En momentos de peligro la jirafa corre a 55-60 km/h, mueve la cabeza hacia atrás y adelante y enrolla la cola. A diferencia de otros animales, no tiene un paso cruzado. Es decir, mueve primero los miembros anterior y posterior de la izquierda y después los de la derecha. Debido a esto a los leones les resulta difícil atraparla. Pero sus crías, al tener las patas débiles cuando son muy jóvenes, no consiguen correr rápidamente como las adultas y los leones las podrían atrapar con facilidad. Por eso las jirafitas están siempre muy cerca de sus madres, quienes, llegado el caso, les dan una patada fatal a los predadores para protegerlas. Detengámonos aquí y meditemos un poco. La jirafa no es un ser humano, es decir, no posee la facultad del razonamiento. En consecuencia, la protección que brinda a sus crías, al igual que otros animales, resulta posible porque es Dios Quien les inspira su forma de proceder. Dios es el Compasivísimo. Respecto a la misericordia y compasión de Dios leemos en el Corán: ...Vuestro Señor es, ciertamente, manso, misericordioso (Corán, 16:47).
LOS GRANDES ELEFANTES
Los elefantes, los animales de tierra firme más grandes, son de dos especies: la asiática y la africana. Esta última es la de mayor tamaño. Llegan a tener tres metros y medio de altura y pesan unos seis mil kilogramos. Sus orejas con forma de pantallas tienen unos dos metros de largo y un metro y medio de ancho. Como pueden imaginarse, con semejante cuerpo no se los puede tener en la casa de uno como mascotas. La trompa, que los distingue y es similar a una manguera, tiene cincuenta mil músculos (¡sí! ¡cincuenta mil músculos!), les sirve para llevarse el alimento a la boca, levantar muchas otras cosas, absorber cuatro litros de agua (que los puede vaciar también en la boca o rociarla sobre el cuerpo) y, por supuesto, oler. En su extremo tiene las ventanas de la nariz. Es sorprendente que con esa trompa “multifuncional” pueda cumplir movimientos tan delicados como levantar una arveja para comerla, usarla como un dedo largo, una trompeta e incluso un megáfono y para darse un baño de tierra seca. Pero los elefantitos no pueden usarla y a veces al pisársela se caen, lo cual no les produce ninguna gracia. La mamá elefante acompaña a los hijos durante doce años y en los primeros seis meses de vida les enseña cómo usar la trompa y nunca se cansa de cumplir con su tarea. Estos animales tienen colmillos largos y agudos a ambos lados de la boca, con los que se defienden o cavan pozos en búsqueda de agua. Sus dientes, que mastican plantas fibrosas, se gastan fácilmente. Debido a ello nuestro Señor les ha dado una característica importante: cada diente que se gasta es reemplazado por otro que está abajo. Un elefante adulto puede comer 330 kilogramos de vegetales por día, equivalentes a unos quince fardos de alfalfa, por lo que gran parte del día pasa alimentándose. Veamos ahora otra cosa interesante en los elefantes. ¿Han pensado cómo hacen para refrescarse? No sé si sabían que tienen una piel tan gruesa que no sudan. Entonces, para reducir el calor del cuerpo deben meterse en el agua o en el barro. También usan a modo de pantallas sus orejas, cruzadas por venas delgadas que enfrían la sangre que pasa por allí y eso ayuda a radiar calor. Otra característica de estas criaturas, que ha sorprendido durante mucho tiempo a los zoólogos y cazadores, es el ruido que hacen con el estómago y que no tiene nada que ver con la digestión: lo controlan a voluntad y lo producen para ubicar a sus amigos, aunque se encuentren a kilómetros de distancia. Pero si se presenta algún peligro guardan un silencio total. Superada la amenaza, reaparecen los ruidos. Otra cosa que llamó la atención de los zoólogos fue la historia de la emigración de los elefantes en las estaciones secas. La hacen siempre por los mismos caminos que limpian de toda basura, incluso pedacitos de madera. Debido a que se esparcen por áreas muy grandes es esencial que estén muy bien intercomunicados y no se limiten a ubicarse por medio del agudo sentido del olfato o los ruidos estomacales. Para ello Dios les creó en la frente un órgano que produce un ruido ronco y así llaman a otros empleando un código secreto no comprensible para los demás animales. Ese sonido llega a grandes distancias, es decir, es un medio de comunicación muy importante.
EL CIERVO : FAMOSO POR SUS ASTAS
¿Han tocado alguna vez la cabeza de un animal con astas? Si lo hicieron seguramente se habrán sorprendido porque algo duro como una piedra emerge de una pelambre y piel suaves. Pueden hacer una comparación con sus uñas, que también salen de debajo de una piel blanda y crecen con elegancia. Pero las astas son más gruesas, rígidas y grandes. Entre los venados sólo los machos tienen astas, excepto los renos, y a los seis años de vida ya están totalmente desarrolladas. Después de pasar la estación en que forman parejas para tener hijos, la cornamenta se cae y crece otra. Los lugares de donde se desprende quedan cubiertos por un vello delgado, irrigado por venas, y eso es lo que se expande para formar las astas nuevas, las cuales van a estar constituidas por un núcleo óseo recubierto por una especie de piel. Completado el crecimiento después de unos tres meses, las venas se cortan y dejan de alimentar ese sector del cuerpo. Entonces los venados raspan la cornamenta sobre superficies duras para quitarse parte de la “piel muerta” y así queda al exterior la estructura dura (queratina y hueso). La longitud, forma y cantidad de ramas en los cuernos difieren de un venado a otro. Posiblemente ustedes se pregunten: ¿Para qué tienen esas astas en la cabeza? Les respondemos: porque son un arma muy importante con la que se protegen de los enemigos. A veces el predador se aleja del venado con sólo ver sus cuernos. El ciervo rojo macho traza los límites de su territorio untando sobre el terreno una sustancia olorosa que segrega por unos lugares llamados glándulas. Si algún extraño se mete en esa zona, lo expulsa de allí por medio de rugidos o corneándolo si puede. Dios los ha creado así a estos animales para que puedan protegerse y protejan a su manada. Si no hubiese sido así estarían indefensos frente a sus enemigos e incluso podrían haber desaparecido. Es decir, Dios, Quien creó a todas las criaturas, dio a cada una su forma de defenderse y protegerse, cosa que nos la recuerda en el Corán: Di: “¿Quién tiene en Sus manos la realeza de todo, protegiendo sin que nadie pueda proteger contra El? Si es que lo sabéis...” (Corán, 23:88).
Como dice el versículo que sigue, Dios es el único protector de todas las criaturas: ...Tu Señor cuida de todo (Corán, 34:21).
LOS CANGUROS Y SUS “BOLSILLOS”
Ustedes pueden preguntarse: “¿Es posible que un animal posea un bolsillo?”. Aunque parezca mentira, los canguros lo tienen en la panza y allí adentro alimentan y protegen a las crías durante su desarrollo. Cuando vemos al bebé canguro sacando la cabeza de ese “bolsillo” (bolsa marsupial), nos mueve a compasión. Sale del vientre de la madre cuando tiene un centímetro de largo --bastante antes de estar totalmente desarrollado-- y se dirige a esa bolsa después de un viaje de tres minutos. Al llegar allí se encuentra con cuatro pezones, cada uno con distintos tipos de leche, pero succiona de la tetilla que le brinda una con la temperatura y grasa exactas que necesita. Las tres tetillas restantes contienen tipos de leches para criaturas más desarrolladas. El recién llegado deja de succionar la primer tetilla a las pocas semanas y pasa a otra. Chicos, ¿no se preguntan cómo un cangurito de sólo un centímetro sabe cuál es el pezón apropiado para él?; ¿no se preguntan de qué modo la madre colocó cuatro tipos de leche en cuatro tetillas distintas?; ¿sabían que la leche de una de ellas es más caliente que la de las otras?; ¿no se preguntan de qué manera la mamá consigue que la composición de cada leche sea distinta? Bueno, como se pueden imaginar, no es la madre la que tiene que ver con todas esas cosas. Tampoco se entera que la leche y sus temperaturas son distintas. Sólo es una mamá canguro que vive bajo el control y cuidado de Dios, al igual que sus bebés. Es nuestro Señor, el Compasivísimo y Misericordiosísimo, Quien le ha colocado los pezones en el lugar más apropiado para las crías, es decir, en la bolsa que tiene en la panza, donde pasan seis meses y medio sin salir. Después y durante dos meses y medio están un tiempo allí adentro y otros momentos en el exterior. Luego de los ocho meses ya no entran más a la bolsa pero antes de abandonarla la comparten con un nuevo hermano que empieza a gatear, sin interferirse entre ellos. Cada uno succiona la tetilla que le corresponde. ¿Cómo saben los hermanitos en dónde deben mamar? La respuesta es obvia: es Dios Quien los inspira. Los canguros infunden temor con sus cuerpos grandes. Desde la punta de la cola hasta la nariz miden unos dos metros y medio. Gracias a sus largos miembros posteriores cubren una distancia de aproximadamente ocho metros en cada salto y mantienen el equilibrio mediante la fuerte cola que poseen. Si piensan que los pies los tienen grandes por casualidad o que a la madre se le ocurrió que podían necesitar los miembros traseros grandes para saltar, se equivocan. Sucede que todo pasa a existir porque es Dios Quien lo crea y dispone del modo más perfecto.
UN DORMILON : EL COALA
Siempre tenemos presente la amorosa estampa del coala de piel gris envolviendo con piernas y brazos los troncos de los eucaliptos. Pero preguntémonos porqué se lo llama “dormilón”. Simplemente porque duerme... ¡dieciocho horas por día! Gran parte del tiempo lo pasa sobre los eucaliptos porque Dios creó sus patas, garras afiladas y largos brazos curvados para que pueda trepar allí rápidamente y sostenerse cómodamente. Dos dedos de sus miembros anteriores están separados de los otros tres. Si comparamos sus “manos” con las humanas debemos hablar de dos pulgares, los cuales difieren mucho de los otros dedos y le ayudan a asirse de las ramas pequeñas. Los clavan como ganchos y así se sostiene sobre los troncos lisos y suaves. Puede agarrarse fácilmente a las ramas con sus cuatro patas y subir a los árboles así. Aunque son conocidos como perezosos, en la foresta se mueven rápido y pueden saltar de una rama a otra una distancia de un metro. Las hembras pueden dar a luz un bebé cada dos años y, al igual que el canguro, lo llevan en la bolsa marsupial, donde pasa los primeros meses. Después y durante un año las crías siguen ligadas a ese medio de transporte. La madre escoge como vivienda un determinado eucalipto, cuya hoja es en la práctica su única comida. Por eso estos animales se encuentran sólo en Australia, donde dicho árbol abarca áreas muy amplias con más de seiscientas especies, aunque comen las hojas de solamente treinta y cinco de ellas. Los distintos tipos de coalas se alimentan de diferentes eucaliptos. Si bien las partes elevadas de esos árboles son vulnerables al viento, viven allí porque les resulta un refugio único. Con una piel suficientemente gruesa resuelven el problema de la inclemencia meteorológica. Es raro que se bajen de los árboles porque se mueven con dificultad en tierra. Las hojas de eucalipto contienen distintas substancias químicas, algunas peligrosas y venenosas. Los coalas antes de comerlas las trituran con sus dientes y los elementos dañinos son filtrados por el hígado y expulsados del cuerpo. Por voluntad de Dios este alimento dañino para otros no lo es para los coalas, quienes comen alrededor de un kilo de hojas por día sin problemas. Debido a que dos tercios de este follaje es agua en determinado momento del año, toda la que necesitan la toman de allí. En concreto, sólo consumiendo hojas de eucalipto cubren todas sus necesidades sin beber agua. Esta armonía entre una planta venenosa y un animal nos muestra que coalas y eucaliptos han sido creados por el mismo Creador. Seguramente es Dios, el Señor de los Mundos, Quien origina todo de modo perfecto.
LOS GATOS SON JUGUETONES Y MUY MIMOSOS
Los gatos son animales que confían fundamentalmente en ellos mismos, sin apegarse particularmente a nadie. Nunca se someten plenamente a los deseos de sus dueños, como lo hacen los perros domésticos. Cuando sienten hambre maúllan y arañan el piso o la alfombra. También ronronean con placer cuando son acariciados. Según la manera en que actúan comunican distintos mensajes. ¿Sabían que los gatos tienen una visión nocturna perfecta? Así es. Incluso pueden ver en un lugar pequeño y oscuro, pues Dios les ha dado un mecanismo de la visión distinto al de otras criaturas. En la oscuridad sus pupilas se agrandan y reciben toda la luz posible, lo que les da una vista aguda. Además, los ojos del gato tienen una capa adicional atrás de la retina, donde se refleja la luz y vuelve a ésta. Es decir, la luz incide en la retina dos veces. Por lo tanto, a diferencia de los humanos, ven muy bien en la oscuridad. ¿Han pensado alguna vez por qué los ojos de los gatos brillan en la oscuridad? Se debe a esa capa adicional que hemos mencionado, pues refleja la luz como un espejo y hace que centelleen. ¿Conocen las características de sus patas? En momentos de peligro sus patas pequeñas se convierten en garras destructoras debido a sus uñas afiladas que tienen allí recogidas. ¿Saben por qué caen siempre parados? Como todos lo vimos alguna vez, el gato al caer desde cierta altura siempre lo hace sobre sus patas. Para mantener el equilibrio usa las uñas y acomoda el centro de gravedad del cuerpo. El Uno, Quien les otorgó todas las características de seguridad para treparse a los árboles y pasearse por lugares elevados, es nuestro Señor Poderoso, el Compasivísimo, el Misericordiosísimo.
EL LEON, REY DE LA JUNGLA
Este animal pertenece a la familia de los gatos y es muy predador. Con su tronco y cabeza grandes, piernas cortas y apariencia fuerte y majestuosa, merece el título de “rey de la selva”, aunque en realidad no vive allí sino en la sabana. Sus medidas son: desde el suelo hasta el lomo alrededor de un metro; desde el hocico al nacimiento de la cola alrededor de dos metros y medio y la cola desde el nacimiento hasta la punta unos ochenta centímetros. Pesa unos 230 kilogramos. Dicho en otras palabras, es un gato grande que desde el hocico hasta la punta de la cola mide más del doble que un niño. Los machos tienen melena alrededor del rostro que les cubre la cabeza, parte de la espalda, los hombros, el pecho y llega hasta la panza, lo cual les da una apariencia impresionante. Esa majestuosidad se las otorgó Dios para que se los vea más fuertes y grandiosos de lo que son. Se pasan todo el día echados o durmiendo a la sombra de rocas o árboles y se despiertan a la noche para cazar. Tienen una visión nocturna perfecta, con la que localizan fácilmente a sus posibles presas. El diseño de la estructura ocular del león es especial y sus pupilas y lentes son más grandes que las de los ojos de otros animales. Eso potencia su capacidad de cazador en el reino animal. Es decir, Dios le ha dado las mejores características en relación con su entorno. Sus rugidos se pueden oír a la noche cuando cazan y antes del amanecer. Al producirlos, se paraliza la vida en la sabana. Los lobos dejan de aullar y los leopardos de gruñir. Todos guardan silencio y escuchan al rey, menos los monos que trepan a los árboles y gritan del modo más estrepitoso posible.
LOS TIGRES : GATOS SALVAJES
¡Nunca vayan a creer que son dóciles como los gatos domésticos! No, son muy salvajes y fuertes. Son los más fuertes de la familia de los gatos. Los tigres bebés abren los ojos a los dos días de vida y la madre es muy feroz con otros animales pero muy sensible y solícita con sus cachorros. Les da de mamar durante seis semanas y luego, de manera gradual, les enseña a buscar su alimento y a cazar. Después de ese período de educación se transforman en adultos y fornidos, capaces ya de correr muy velozmente: de un salto llegan a cubrir una distancia de cuatro metros y la apertura de las patas delanteras llega a algo más de un metro. Este animal puede camuflarse fácilmente pero es inconsciente de que dispone de esa habilidad. En otras palabras, su pelambre se confunde con los colores y las formas del lugar en que se mueve. Gracias a eso puede acercarse con sigilo y sin ser advertido hasta sus posibles presas. Además, los colores que le cubren le dan rasgos estéticos bellos e impresionantes. Las líneas sobre la piel y mejillas y la forma de las cejas, difieren de un tigre a otro. Cada uno de ellos marca el territorio donde caza con una secreción que deposita sobre las ramas y se lo respetan mutuamente. También les gusta mucho el agua y son muy buenos nadadores. Por supuesto, todas esas características se las inspira Dios. Si bien es cierto que al crecer son animales muy salvajes, Dios inspiró a las mamás tigres ternura y misericordia para con sus crías, las que son tan lindas que nos enternecen.
LOS LLAMADOS OSOS PANDAS CON ANTIFACES
Es posible que a este animal, parecido a un gran juguete, lo hayan visto en el zoológico. ¿Sabían que lo único que come es bambú? El adulto ingiere unos 15 kilogramos por día, es decir, seis mil kilogramos por año. Por eso mastican todo el día. ¡Qué comilones que son! Tienen una característica muy interesante: en las manos poseen seis dedos, no cinco. Nuestro Señor, Quien hace todo adecuado para la vida de cada especie, les ha dado seis dedos de modo que puedan agarrar y comer fácilmente el alimento. Viven siempre en lugares húmedos y cálidos y entonces a sus hijos los tienen en cuevas. Los bebés vienen al mundo ciegos y sin dientes, como si fueran pequeños juguetes. Normalmente nacen en septiembre con una altura de diez centímetros y un peso de unos 140 gramos. Son ochocientas veces más pequeños que sus madres al nacer pero se desarrollan muy rápidamente de modo que a los nueve meses pesan 27 kilogramos. ¡Recuerden que un chico de seis años tiene ese peso! No son animales feroces y solamente raspan los troncos para limpiar y limar las uñas. Con el objeto de evitar a sus enemigos trepan a los árboles a pesar de sus grandes cuerpos. Son muy tranquilos y no les preocupa que se les acerquen los humanos. Es decir, si un día encuentran a un panda durmiendo, no se preocupen si se despierta porque no les hará nada.
A LOS OSOS LES ENCANTA LA MIEL
Los osos son conocidos por su pelambre que abriga mucho, por comer miel, ver poco y oír poco. ¿Cómo hacen entonces para encontrar la miel? Gracias a una nariz muy buena que Dios les otorgó. Con su olfato aguzado encuentran la mejor de los alrededores. Posiblemente ustedes ya sepan que son bastante torpes. Pero no crean que son lentos. Pueden correr a 48 km/h y son muy fuertes. Con un cuerpo de dos a tres metros de largo, algunas especies suben a las ramas altas de los árboles y se pasan bastante tiempo allí. Por lo general se alimentan de vegetales y trepan hasta los treinta metros en búsqueda de alimentos. Al ubicar una colmena la golpean con las patas, las abejas se van y comen la miel con muchas ganas. ¡Pero ustedes nunca intenten hacer algo así porque las abejas les picarían en todo el cuerpo y les provocarían daños! Pero al oso Dios le puso una cobertura que le protege de las abejas y por eso no tienen problemas. En otoño se meten en una cueva, se cubren con ramas y pajas y se quedan allí hasta la primavera. Antes de irse a dormir tanto tiempo comen mucho, especialmente piñas y castañas, de modo que bajo la piel gruesa acumulan una capa de grasa que la consumen a lo largo del invierno. El ser humano moriría si tuviese un desgaste así. El parto es otra cosa que los retiene bastante tiempo en la cueva. Por lo general dan a luz tres cachorros y los alimentan con leche hasta la primavera. Nacen desdentados, ciegos y pelados. Al salir de la cueva la madre debe protegerlos pues sino serían atrapados por los cazadores o muertos por los osos. Nuestro Señor, Quien es el Compasivísimo y el Misericordiosísimo, atiende las necesidades de todas las criaturas y las protege. Y así procede con los simpáticos oseznos para que sobrevivan y no los atrapen. Les aseguró la protección por medio de sus madres fuertes que nunca los abandonan.
LOS GIGANTESCOS HABITANTES DE LAS NIEVES : LOS OSOS POLARES
Si ven un oso polar, uno de los animales más grandes del planeta, podrían creer que es un ser humano gigante de la nieve. Pesa unos ochocientos kilogramos (¡más o menos diez personas juntas!) y mide dos metros y medio de altura. Posee algunas características sorprendentes, como lo es la gruesa capa de grasa que Dios le colocó debajo de la piel, que le permite vivir en el Polo Norte y tolerar las temperaturas de esa zona --una de las más frías del mundo-- y las tormentas de nieve. ¿Han pensado alguna vez por qué estos animales no viven en los desiertos africanos? Por cierto, la respuesta es que Dios los creó en consonancia con el entorno en que habitan. Si estuviesen en el desierto difícilmente soportarían apenas unos minutos de un clima tan cálido. Lo que los hace distinto a los demás osos es que no les gusta mucho invernar. Solamente lo hacen las osas que van a tener crías. Dios, “el Proveedor, el Uno Que provee del sustento a todos los seres humanos continuamente”, dispone el alimento para los cachorros. La leche de sus madres contiene mucha grasa, muy necesaria para ellos. Gracias a la misma y a que se desarrollan muy rápidamente, salen de las cuevas en primavera. Habitan en el Polo Norte, el norte de Canadá y el norte de Siberia. ¿Sabían que estos animales son muy buenos para nadar y bucear? Pues sí, y para ambas cosas usan sus miembros delanteros como remos, por un favor que Dios les concedió. Y al meterse en el agua cierran las ventanas nasales y mantienen los ojos abiertos. Además, los pies nunca se les enfrían gracias a como los formó Dios, es decir, con una piel gruesa y una capa de grasa de diez centímetros de espesor. Si tuviesen una piel como la humana no podrían sobrevivir porque se congelarían. Por eso es que pueden nadar dos mil kilómetros en el agua helada a una velocidad de 10 -11 km/h o caminar tranquilamente sobre el hielo o la nieve. Posiblemente ustedes ya se habrán dado cuenta de que el color de la piel de los osos polares es siempre blanca o blanquecina. Eso hace difícil distinguirlos de la nieve que cubre los glaciares y los desiertos congelados del norte que se extienden a lo largo de miles de kilómetros. Pueden imaginarse lo difícil que les resultaría ocultarse si fuesen negros como los cuervos o colorados como los loros del trópico. Tienen un olfato agudo con el que pueden detectar fácilmente a una foca que se oculta bajo una capa de nieve de medio metro de espesor. Al ir de caza utilizan algunas tácticas. Aunque son de piel blanca, tienen la nariz negra, lo que puede delatarlos en la nieve. Entonces se cubren la nariz con las patas y de esa manera y acostados sobre la nieve pasan inadvertidos para su presa. Esta forma de proceder merece una atención particular. Como pueden darse cuenta, es muy improbable que los osos empleen esa táctica de cubrirse la nariz porque sepan que sus posibles presas se la pueden ver o porque lo descubrieron después de infructuosos intentos de caza. Es decir, si hacen lo que hacen es porque Dios les enseñó a actuar así. Como todas las demás criaturas, el oso polar también está bajo la protección del Todopoderoso.
LAS FOCAS : NADADORAS VELOCES
Este animal cariñoso que la mayoría de ustedes lo conocen por medio de la TV, los circos y los zoológicos, se pasa casi toda la vida en el agua. Bucea y nada muy bien y se siente tan feliz haciendo eso y permaneciendo sobre los glaciares como nosotros sobre tierra firme. La temperatura en la zona en que vive es de cinco grados centígrados bajo cero incluso en primavera. Nosotros tendríamos que estar muy abrigados en un lugar así pero las focas no sienten frío para nada gracias a la piel que poseen y a la grasa que acumulan en el cuerpo. Aunque viven en colonias, las madres reconocen a sus hijos fácilmente. ¿Cómo lo hacen? Apenas nacen les dan un beso y en ese momento fijan el olor de los mismos y ya los distingue de todas las demás crías. Las foquitas nacen cubiertas con un aceite llamado “óleo infantil”, que les mantiene el cuerpo caliente. Esa capa de aceite es tan gruesa que las foquitas flotan como si estuvieran usando un chaleco salvavidas cuando las madres les dan lecciones de natación. Como sabrán, el aceite flota y no se hunde porque es más liviano que el agua. La enseñanza natatoria dura dos semanas y después los cachorros ya se valen por sí mismos. Como en el caso de otros animales, todas las características que exhiben las focas, favorables para el medio en que viven, fueron dadas por Dios. Este es otro signo que nos muestra la Misericordia de nuestro Señor.
LOS PINGÜINOS EN SUS CHAQUETAS DE CEREMONIA
Los pingüinos Emperador, con su caminar tambaleante, son pájaros que no pueden volar y conviven en grandes colonias. Han sido creados por Dios de la mejor manera para que sobrevivan incluso en regiones donde la temperatura llega a los ochenta y ocho grados centígrados bajo cero. Pensemos que en invierno nosotros nos ponemos campera de lana, medias, guantes, gorro, etc. Pero los pingüinos no necesitan nada de eso, ni siquiera botas o zapatos, para caminar bien sobre la nieve y el hielo sin resbalarse. Además no tienen casas o madrigueras sino que viven sobre el hielo. ¿Sentirán frío? ¡Para nada!, porque Dios los creó de tal manera que pueden vivir normalmente en un mundo helado. El comportamiento de estos animales es muy distinto del de los humanos. Veamos. En invierno emigran en conjunto en dirección al sur, hacia los hielos antárticos. Al entender que se acerca esa temporada deciden a qué lugar se dirigen y el momento de la partida. Que eso suceda sin ningún tipo de discordia en un grupo tan numeroso, puede explicarse solamente por medio del control total que tiene Dios sobre ellos. De otro modo sería imposible que llegaran a un acuerdo tan absoluto. La estación en la que emigran es también la del apareamiento y el momento en que los machos buscan esposa. Entonces tienen que reconocer muy bien “la canción del compromiso” para no perder a la novia, quien la emite. En otras palabras, el pingüino macho tiene la capacidad de distinguir un determinado sonido de todos los demás. Solamente por voluntad de Dios el pingüino --carente de entendimiento e inteligencia como los entendemos los humanos-- puede elegir a su pareja de entre cuatrocientos mil congéneres y reconocer su voz. Esa sensibilidad también la poseen las crías y la usan para no perder a sus madres. Si no existiera este mecanismo de identificación el caos sería inevitable. El orden singular que Dios estableció para los pingüinos y las características con que los dotó, les asegura una vida ordenada. Después de aparearse la hembra pone solamente un huevo y es responsabilidad del macho incubarlo. Eso lo hace a una temperatura ambiente de unos treinta grados centígrados bajo cero y no se mueven de arriba del huevo durante sesenta y cinco días. Es un período de tiempo difícil porque mientras está allí no puede ir a buscar nada para comer. La hembra, mientras tanto, recoge alimento para el bebé que va a nacer. ¿Se imaginan lo que es estar sesenta y cinco días sin comer como los pingüinos que incuban un huevo? Nosotros nos moriríamos. Pero ellos aguantan bien, con paciencia y sacrificio, sin aburrirse, puesto que están inspirados por Dios para cumplir esa tarea. Después de ese período el macho pierde un tercio del peso corporal. Un ser humano de sesenta kilogramos perdería en ese caso 20 kilogramos. El bebé, después de salir del huevo, transcurre los dos primeros meses entre las patas de sus padres. Esa protección es vital porque si abandonara ese lugar por solo un par de minutos, moriría. No cabe ninguna duda de que Dios inspira esa protección a la pareja adulta. Así testimoniamos, una vez más, que Dios es el Protector de todo lo viviente. Por otra parte, la colonia de pingüinos, con cuatrocientos mil miembros, exhibe un perfecto ejemplo de solidaridad al reunirse y vivir juntos para protegerse entre ellos del clima polar. Al hacerlo de esa manera se reduce a la mitad la pérdida de calor de cada uno. Y como tienen en cuenta que los que están en el borde exterior del conjunto se enfrían más, van rotando sus posiciones y a los que soportan más frío en un momento los hacen pasar al centro del grupo para asegurarse que se calienten. Estos animales han vivido en gran armonía durante mucho tiempo y lo seguirán haciendo así, sin que ninguno plantee alguna objeción.
EL FRAILECILLO PESCADOR
Posiblemente nunca hayan oído hablar de este animal, pero cuando lo conozcan se pondrán contentos y les gustará mucho. Gran cantidad de gente cree que se trata de un tipo de pingüino, pero es un pájaro con sus rasgos particulares. A diferencia de los pingüinos que no vuelan y viven en el Polo Sur, los frailecillos vuelan y viven en el Polo Norte. Tienen en común la facilidad para vivir en climas muy fríos. Las parejas de frailecillos son permanentes y tienen una cría por año. En la estación de procrear, las líneas que tienen en los picos, normalmente deslustradas, adquieren brillo. Pero ese cambio no ocurre de manera accidental sino que sirven a un propósito particular otorgado especialmente por Dios. Estos pájaros usan esas líneas como banderines de señales y de ese modo se comunican entre sí a grandes distancias. ¿Pueden ustedes hacer aparecer líneas sobre sus narices cuando tienen ganas? Claro que no. Pero supongamos que los frailecillos las tienen de nacimiento. Así y todo, ¿podrían darles distintos aspectos o hacerlas desaparecer a voluntad? Por supuesto que no, porque sabemos que sólo nuestro Señor puede realizar esa tarea artística. Para nuestro Señor es fácil crear distintos tipos de pájaros y dotarlos con rasgos particulares y apropiados a sus ambientes. De la misma manera, para El es fácil crear una línea sobre sus picos o hacerla desaparecer. Dios, Quien los ha creado tan bellos, también les dio características sobresalientes. Sigamos estudiándolos. Después de cumplir seis semanas de vida las crías se separan de sus padres y empiezan a volar sobre el mar abierto. Un frailecillo saludable vive unos 25 años y puede bucear hasta profundidades bastante grandes. ¿Qué le pasaría a un ser humano si quisiera imitarlo? En primer lugar necesitaría una provisión de oxígeno. En segundo lugar, correría riesgos puesto que la presión aumenta sobre el cuerpo cuanto más se sumerge. ¿Cómo aprendieron los frailecillos las técnicas necesarias para contener la respiración bajo el agua y volver luego a la superficie? Una vez más nuestro Señor nos muestra lo sublime que El es y la singularidad de Su arte en la creación. Otro aspecto hermoso del frailecillo es la estructura de su boca, lo que le permite retener hasta sesenta y dos pececillos por vez. ¡Y el único propósito de ello es alimentar a sus crías!
LOS PAJAROS, MONARCAS DE LOS CIELOS
¿No han visto (los seres humanos) las aves sujetas (al servicio de Dios) en el aire del cielo? Sólo Dios las sostiene. Ciertamente, hay en ello signos para gente que cree (Corán, 16:79).
Al igual que otros chicos, posiblemente también ustedes quisieron volar como los pájaros. Al verlos parece que es algo fácil, pero no es así. El pájaro consume mucha energía para despegar del suelo porque tiene que elevar todo el cuerpo con sus pequeñas alas. Pero una vez en el aire Dios le facilita el mantenerse en vuelo sin mucho esfuerzo y “flotar” sobre las corrientes de aire que producen los vientos, cosa que disminuye el gasto de energía. Al disminuir los vientos vuelve a aletear. Es decir, por medio de esas características Dios ha permitido que pueda cubrir distancias muy largas y emigrar hasta países remotos. Hay especies de pájaros que pueden volar entre mil y cuarenta mil kilómetros. Esta última es la medida de la circunferencia de la Tierra, con lo que nos podemos hacer una mejor idea de la distancia que cubren algunas aves. Al atravesar los océanos no tienen ninguna posibilidad de descansar o hacer postas. Sigue siendo un misterio cómo hacen para no perder la orientación en semejantes viajes. Las emigraciones son precisas y no se pierde ningún individuo, ni joven ni adulto. Es interesante observar que piernas tan delgadas acarrean cuerpos relativamente voluminosos. Pero si fuesen más gruesas y pesadas tendrían más dificultades para volar. Casi todas las criaturas aladas duermen sobre una pata y sobre la misma descargan el peso de todo el cuerpo pero no pierden la estabilidad. Uno de los órganos más sensibles en los pájaros es el de la visión. Además de la capacidad que Dios les dio para volar, también les otorgó una visión extraordinaria debido a que la necesitan durante el vuelo. Pueden ver objetos distantes mucho mejor que los humanos y poseen un ángulo de visión más amplio. Al advertir los peligros de antemano determinan exactamente la velocidad y dirección del vuelo. Sus ojos permanecen fijos en sus cuencas, es decir, no se mueven como en los humanos. Sin embargo, amplían rápidamente el ángulo de visión volteando a un lado y otro su cuello y cabeza. Por otra parte, los pájaros nocturnos, como los búhos, tienen ojos más grandes y con células especiales sensibles a un mínimo de luz. La visión de la lechuza pelada, por ejemplo, es cien veces más aguda que la del ser humano. Gracias a eso puede ver y cazar muy bien de noche. Las aves acuáticas, por otra parte, no tienen ningún problema en buscar y atrapar insectos y moluscos subacuáticos, gracias a unos ojos que han sido creados para ver claramente debajo del agua, donde nosotros no los podemos tener abiertos más de cuarenta y cinco segundos. Este tipo de visión les resulta necesaria porque dependen de ella para alimentarse. Así las creó Dios. Para los pájaros también es importante la audición y por eso poseen un tímpano que les permite oír sonidos muy débiles. Las capacidades indicadas, es decir, la visión aguda en la oscuridad y debajo del agua y la audición de sonidos débiles, no las posee el ser humano. Pero evidentemente no las necesitamos tanto porque funcionamos bien sin ellas. Para los pájaros, en cambio, serían carencias importantes, pues les resultaría muy difícil encontrar alimentos, dar de comer a las crías y conservar a la especie. Los oídos de las lechuzas son muy sensibles a los sonidos. Oyen mejor que los humanos. En ambos lados de la cabeza tienen una especie de cerdillas que reúnen las ondas sonoras y las envían al oído interno. Las del lado izquierdo al oído izquierdo y las del lado derecho al oído derecho. Además los oídos no están ubicados al mismo nivel sino que uno está más alto que el otro. Entonces perciben sonidos de distintas direcciones, con lo que determinan correctamente la ubicación de quien los emite, aunque no lo vean. Es una ventaja muy importante en climas nevados, cuando se vuelve difícil encontrar una presa. Algunos pájaros producen varias voces para despistar a sus predadores. Por ejemplo, muchos de ellos que anidan en los huecos de los árboles, silban o sisean como las víboras cuando son molestados. De ese modo los predadores se alejan inmediatamente del lugar. Además nuestro Señor ha dado a algunas aves pies con membranas (membranas interdigitales) para que puedan nadar más rápido, pues cumplen la función de las patas de ranas en las personas que bucean. Otras construyen nidos falsos para proteger a sus crías de los predadores, especialmente en la India y Africa donde son muchos los animales que se alimentan de sus huevos. Por ejemplo, el reyezuelo africano protege a sus huevos rodeando el nido donde están con muchos otros vacíos. Las víboras que viven en los árboles en las regiones tropicales son muy venenosas, motivo por el cual la entrada de los nidos de un tipo de pávido propio de esa región es secreto y complicado. Además, como otra precaución, hacen sus nidos en árboles muy espinosos, como la acacia, y engañan a sus predadores con una gran cantidad de nidos falsos. ¿Han prestado atención a los picos de los pájaros que vuelan cerca de ustedes todos los días? Dios los creó de distintas formas para distintas especies y cumplen funciones muy importantes. Tienen la estructura más adecuada para alimentarse en el ambiente que les es propio. El de las aves que comen peces es generalmente largo con forma de cucharón, lo cual las convierte en buenas pescadoras. El de las que se alimentan de plantas, se compatibiliza perfectamente con lo que tienen que comer. Es decir, la creación de Dios es sin tacha y completa porque a todas las criaturas las dota exactamente con lo que necesitan.
LAS CIGÜEÑAS DE PATAS LARGAS
En los días cálidos de primavera, mientras remontamos nuestros barriletes, vemos pasar a las cigüeñas. Son pájaros grandes migratorios que miden un metro y medio de altura, con alas amplias y una cola negra larga. Patas y picos largos y rojos les dan una apariencia agradable. Una de las características más notables de la cigüeña es la manera en que vuela, pues extiende la cabeza hacia delante y las patas hacia atrás. Este estilo tan estético le permite volar mucho más ligero cortando el aire de modo aerodinámico. Emigran todos los años a regiones cálidas porque el frío les afecta. El verlas llegar nos avisa que se aproximan días de temperatura elevada. En verano viven en las regiones templadas que se extienden desde Europa al norte de Africa y desde Turquía al Japón. Antes de la época fría emigran al hemisferio sur, a las zonas tropicales de Africa y la India. Es sorprendente que en ese momento del año sepan que en el hemisferio sur hace calor. Pero más sorprendente es que seis meses después, exactamente en primavera, hagan todo el camino de vuelta, cubriendo miles de kilómetros, para retornar a los nidos que habían dejado. ¿Cómo hacen para regresar exactamente al lugar donde quedó su nido vacío tanto tiempo antes? ¿Usarán algún tipo de instrumento para no desviarse del camino? Por supuesto, esa memoria y sentido de orientación tan excelentes han sido inspirados por Dios, Su Señor. Además, no viajan sobre los mares porque necesitan de tierra firme donde descansar. Por eso lo hacen bordeando los mares y pasan por lugares como el Bósforo, el Estrecho de Gibraltar y el Canal de Suez. No rehuyen a los seres humanos y los nidos los construyen los machos, con ramas, en las partes elevadas de los edificios, árboles y chimeneas. Luego se dedican a cuidarlos, por lo que se alejan muy poco de los mismos y sólo para buscar alimento. Algunas cigüeñas hacen sus nidos en zonas de pantanos, en ramas elevadas y viven en grupos. En un mismo ciprés pueden encontrarse doce nidos grandes. El Corán señala la convivencia de las aves en comunidad: No hay animal en la tierra, ni ave que vuele con sus alas, que no constituyan comunidades como vosotros. No hemos descuidado nada en la Escritura. Luego (el Día de la Resurrección), serán congregados hacia su Señor (Corán, 6:38). ¿Saben cómo se comunican entre ellos? Lo hacen por medio de ruidos producidos con los picos. Al hacer “tap, tap”, se explican muchas cosas entre sí. ¿Sabían que las cigüeñas bailan? Cuando quieren formar pareja, danzan y hacen sonar sus picos mientras agitan las alas. En tanto danzan buscan formalizar la relación. Si tienen en cuenta que algunos de estos pájaros son casi tan altos como una persona, se pueden imaginar lo imponente que es ese baile. Las cigüeñas más pequeñas son del género Anastomus y viven en Asia y Africa. Se las llama “pico abierto” porque al cerrarlo sólo se tocan los extremos de las dos partes. Esta característica les facilita alimentarse de caracoles y mejillones. Que Dios cree a todo lo viviente con distintas capacidades y rasgos bellos, es algo que profundiza nuestra fe en El y nos ayuda a ponderar más Su potestad y creación perfecta en todo lo que vemos a nuestro alrededor, así como a comprender Sus signos.
UN PAJARO ROSADO : EL FLAMENCO
Posiblemente han visto por la TV unas aves de color rosado con cuellos y patas largos. Ese animal, que se llama “flamenco”, deja sus huevos en el fango de las lagunas y a la sombra. Pero lo interesante es que los deposita en un nido hecho con un barro de secado muy rápido. Imagínense que ustedes son flamencos y tienen que construir ese nido. Entonces deberán descubrir: 1) cuál es el barro que se seca más rápido y en qué lugar instalarlo; 2) de qué manera incubar mejor el huevo; 3) determinar si es mejor poner el huevo al sol o a la sombra; etc. Pero los flamencos saben cómo hacerlo sin ninguna duda o problema. Aunque tienen patas largas que les pueden resultar muy incómodas, incuban durante un mes y esperan que el polluelo salga del cascarón. Si lo tuviesen que hacer ustedes, ¿se animarían a sentarse sobre el huevo con un cuerpo tan grande? ¿Serían capaces de calcular si el huevo aguanta el peso corporal sin romperse? Seguramente son cosas que no podrían determinar rápida y correctamente. Pero los flamencos lo hacen sin equivocarse y sin demora porque su Señor les inspiró el conocimiento de todo eso. La figura de esta ave atrae nuestra atención por su cuello largo y el color de sus ojos. Es buena nadadora gracias a sus patas con membranas interdigitales, las que también le ayudan a caminar sobre los terrenos pantanosos y blandos sin hundirse. Como vemos, los flamencos han sido creados con todos los detalles necesarios para sobrevivir.
LOS CISNES Y SU GRAN ELEGANCIA
Con su elegancia, blancura y cuello largo que les caracteriza, los cisnes nadan orgullosamente. Todos admiran su prestancia. Son tan bellos que se los ve como parte de los adornos de la creación. Posiblemente ustedes conocen el cuento del patito feo. Pues bien, cuando el cisne recién nace es muy feo. Tiene un color entre crema y marrón, es de cuello corto y está cubierto de plumas muy densas. Después de un par de horas de haber salido del cascarón puede comer y nadar. Sus padres lo cuidan muy bien durante dos meses. Por último el feo pequeñín se convierte en un adulto magnífico. Esa capacidad para transformarse en buen nadador apenas nace y luego en una criatura hermosa, solamente es posible debido a la perfección de Dios en el arte de la creación. Leemos en un versículo coránico: Que ha hecho bien cuanto ha creado... (Corán, 32:7). El agamí o cisne blanco norteamericano se aplasta sobre los huevos para mantenerlos calientes. Ocasionalmente se pone de pie y los da vuelta. De ese modo se asegura que la temperatura sea pareja en cada uno de ellos. Por cierto, es Dios Quien inspira a los cisnes el tipo de cuidado que necesitan sus huevos para ser incubados. Debido a la capacidad con que Dios les dotó, se desplazan muy rápidamente tanto en el aire como en el agua, lugar éste en que se sienten más a gusto. Gracias a sus patas con membranas interdigitales son muy buenos nadadores. Comienzan la emigración cuando llega el frío y vuelan a grandes altitudes alineados. Si en la ruta encuentran vientos fuertes pasan a una formación en “V” para aprovechar mejor la energía, avanzar más y no cansarse tanto. Por supuesto, es imposible que los cisnes hayan descubierto los distintos métodos de navegación aérea pues eso requiere conocimientos de aerodinámica y física avanzados. Para quienes no lo saben, la aerodinámica es el estudio de las fuerzas y el movimiento resultante de los objetos en vuelo. Es decir, vuelan porque Dios, Quien posee el conocimiento de todo, los ha inspirado.
¿Es que no han visto (los hombres) las aves encima de ellos, desplegando y recogiendo sus alas? Sólo el Compasivo las sostiene. Lo ve bien todo (Corán, 67:19).
Los cisnes se alimentan de los vegetales que encuentran en los pantanos, fuentes y costa de los ríos. El cuello largo les ayuda a alcanzarlos y pueden sumergirse como los patos sin problemas. Además, al zambullirse en busca de nutrientes y raspar el lecho con sus patas, lo transforman en blando o mullido, con lo que realizan una tarea importantísima pues al arrancar las plantas también las diseminan por medio de sus semillas, gajos, etc. De esa manera nuestro Señor hace que el cisne asegure una reproducción ampliada de las mismas.
LOS AVESTRUCES (¡SON TAN GRANDES QUE NO PUEDEN VOLAR!)
Los avestruces, las aves más grandes del mundo, son más altas que nosotros: llegan a los 2,5 metros y pesan unos 120 kilogramos. Viven en colonias en Sudáfrica y no pueden volar, pero Dios les dio otra capacidad para escapar de sus predadores: la de correr muy rápidamente con sus piernas largas. De lo animales bípedos es el más veloz: desarrolla 70 km/h. ¿Sabían que los avestruces tienen solamente dos dedos en cada pie y que uno de ellos es bastante más grande que el otro? Cuando corre se apoya únicamente en los dedos grandes. También son muy buenos combatientes y para defenderse de sus enemigos los patean. El ave más grande del planeta también pone los huevos más grandes de la Tierra en un nido que cava profundamente en la arena. Los deposita allí y si la cantidad es superior a doce agranda el agujero todo lo que haga falta. Luego los cubre con arena. Podría construir el hoyo en la tierra, pero gastaría más energía y sería algo más difícil. Es decir, trabaja sobre el terreno que Dios le inspira. Todos los huevos de una bandada de avestruces son cuidados por una sola hembra. De todos modos, si son demasiados, la cuidadora da preferencia a sus propios huevos, identificándolos por medio de los poros de aire en la cáscara. Los polluelos nacen totalmente indefensos y podrían ser atacados por cualquier predador. Por lo tanto, se valen de una táctica para protegerse: se tiran al suelo y se hacen los muertos. ¿Cómo un recién nacido puede saber que debe aparentar estar muerto para defenderse de los predadores? La respuesta es obvia. Nuestro Señor, el Uno Que enseña y educa a todas las criaturas, se lo ha enseñado para que se proteja.
EL MAJESTUOSO PAVO REAL (EL AVE MAS GALLARDA DEL REINO ANIMAL)
Seguramente quienes fueron al zoológico vieron allí al pavo real con su plumaje magnífico. Lo más destacado es su cola, adornada con plumas verdes y brillo dorado, aparentando filigranas con regatones redondeados y éstos con pequeñas marcas al medio. Todo un espectáculo. Pero a esa cola no se la puede ver siempre sino que hay que esperar la época de apareamiento, que es cuando el macho la despliega en forma de abanico con el objeto de atraer la atención de la hembra. En este punto debemos preguntarnos algo. ¿Cómo es posible que un pavo real, incapaz de apreciarse a sí mismo, pueda estar seguro que lucirá bello y atractivo al momento de desplegar la cola? Sin duda, nuestro Señor, el Creador de esa belleza, también le ha inspirado al animal cómo usarla. ¿Es posible que semejante hermosura haya pasado a existir por decisión y esfuerzo del propio pavo real? ¿Es posible que toda esa armonía de forma y color se haya producido por casualidad? Seguramente ambas preguntas hay que responderlas por la negativa. ¿Le creerían a un amigo que les dijera que el cuadro que tiene en su casa se pintó solo o como consecuencia de un salpicado accidental de distintas pinturas? Por cierto que no. Entonces, es más que imposible que una belleza superior a cualquier cuadro se haya producido por sí misma o como producto de la casualidad. La asombrosa armonía que se observa en la cola del pavo real se debe a que fue creada por el único Creador, es decir, Dios.
UN PAJARO QUE IMITA : EL LORO
Los loros son pájaros coloridos que viven en las regiones tropicales. Llevan una vida muy social. Es interesante que sepan que son muy generosos pues les gusta compartir el alimento entre ellos. En el bosque cada bandada va de una copa de árbol a otra con sus chillidos característicos y así se avisan el lugar donde hay frutos para comer. Al alimento lo sostienen con las patas y lo mastican como si fuera un emparedado. Lo que más les gusta es la semilla del girasol. Con la ayuda de una lengua retorcida abren la semilla por el medio --maniobra algo problemática-- y se la comen. La hembra pone de dos a ocho huevos por año y comparte con el macho su incubación. La incubación, por si no lo saben, es el período de tiempo en que en el huevo se desarrolla el embrión hasta que el polluelo rompe la cáscara. Los loritos recién nacidos no tienen plumas y comen el alimento previamente digerido que le dan sus padres. La característica más importante del loro es la de imitar sonidos, pudiendo repetir las palabras que oye continuamente. Pero, por supuesto, no comprende lo que dice. Incluso puede imitar el sonido de una campana o de un timbre. Por lo tanto, si alguno de ustedes tiene un loro en su casa, puede creer que alguien ha tocado el timbre en la puerta cuando el animalito lo imita. Si esta criatura tan especial no hubiese sido creada, no nos hubiésemos imaginado que pudiera existir un pájaro tan colorido que repitiese nuestras palabras. Es decir, no podemos concebir nada que Dios no nos haya enseñado o que no tenga dispuesto que aprendamos o lo concibamos. Dios es el Originador de todo y El crea todo de modo singular. De esto habla el Corán: Es Dios, el Creador, el Hacedor, el Formador... (Corán, 59:24). Dios crea para nosotros muchas otras cosas bellas además de los loros y nos exhibe Sus milagros y signos por todas partes y en todo momento. Como retribución El quiere solamente que le reconozcamos Sus atributos, seamos agradecidos con El y Le recordemos permanentemente.
PATOS DE CABEZA VERDE
¿En qué animales piensan primero cuando se les dice que “caminan meneándose”? ¿No es en los patitos siguiendo a su madre? Los patos tienen técnicas propias para alimentarse. Algunos comen insectos y vegetales mientras nadan, otros los buscan con la cabeza y la mitad del cuerpo sumergidos en el agua, en tanto que otros más se zambullen completamente y rastrean el fondo para encontrarlos. Entre los dedos de sus patas tienen una membrana bastante amplia (membrana interdigital) que les ayuda en el desplazamiento subacuático. Al empujar las piernas hacia atrás para nadar, expanden aún más esa membrana y aumenta la potencia del impulso. Pero no son buenos caminantes en tierra firme. Es por eso que casi siempre están en el agua, excepto en la época de reproducción. Las aves acuáticas como los patos tienen en el interior del cuerpo sacos de aire parecidos a pequeñas pelotas. Esta es una de las razones por la que flotan. Cuando quieren sumergirse expulsan el aire contenido allí. Por supuesto, todo lo mencionado no existe en los patos por casualidad. Fue Dios Quien les concedió las características con las que están dotados. El macho siempre tiene las plumas más brillantes que la hembra. Se trata de una protección importante para ésta porque cuando incuba los huevos pasa más desapercibida para los predadores, incluso a una corta distancia, gracias a su color apagado. Por otra parte, sus enemigos desvían la atención hacia el macho debido, justamente, a sus plumas brillantes. Cuando el predador se acerca al nido el pato revolotea, produce mucho ruido y hace grandes esfuerzos por alejarlo de allí. Los patos adultos que no incuban y andan en grupos, ocasionalmente cuidan a los patitos. A las pocas horas que éstos salen de los cascarones ya comienzan a nadar y a alimentarse solos. Por supuesto hacen eso y sobreviven por inspiración de Dios. Imagínense lo que les hubiera ocurrido a ustedes si al momento de nacer los hubieran metido en una pileta o en un lago: por uno u otro motivo habrían muerto ahogados. Pero Dios ha otorgado a los patitos la capacidad de nadar de inmediato, no hundirse y no ahogarse. ¿Sabían que los patos vuelan a 50 km/h? ¿Sabían que consiguen evitar a los predadores cambiando la dirección del desplazamiento continuamente? Ahora bien, ¿puede decirnos alguno de ustedes cómo saben los patos que tienen que actuar así? Sin duda, es Dios Quien les enseñó, de la misma manera que a cada criatura le enseña lo que le corresponde saber.
LA MARIPOSA : UN MILAGRO MULTICOLOR
¿Sabían que las mariposas no tienen alas al nacer? Así es. Porque antes de verlas en su jardín o en el campo pasan por cuatro fases o etapas. Algunas viven dos meses y otras solamente veinticuatro horas. Del huevo fecundado puesto por una mariposa sale una pequeña larva (primera fase) que se va a transformar muy pronto en una oruga muy atractiva (segunda fase). En el cuerpo de ésta hay catorce o quince anillos, dos ojos pequeños en la cabeza y una mandíbula que la usa para masticar. En la parte frontal del cuerpo tiene ocho patas, no dispone de alas, las antenas son muy cortas aún y su glándula salival segrega un tipo de seda. Al aumentar la edad no se hace más larga sino más pesada. Por último se desprende de la piel gradualmente rasgándola y reemplazándola rápidamente por otra más apropiada a su cuerpo obeso. La oruga es un alimento muy delicioso para los pájaros que buscan insectos. Por esa razón nuestro Señor le ha enseñado varias técnicas de defensa. Algunas se colocan bien rectas y se confunden con las ramas. Otras se camuflan en las hojas que tienen exactamente el mismo color que ellas. Otras más se hacen las muertas. Todas esas son técnicas vitales para sobrevivir y llegar a transformarse en mariposas cuyos colores también se asemejarán a los del ambiente en que viven. Pero, ¿cómo hace la mariposa para controlar esa semejanza si no puede observarse a sí misma? ¿Cómo puede estar segura de que no se equivoca? Por cierto, es Dios, Su creador, Quien coloca a las mariposas en los lugares más seguros y convenientes para ellas. Dios, que es “el Misericordioso” y “el Protector”, les otorga a los seres vivientes distintas capacidades como una manifestación de sus atributos, para protegerse de los peligros. Es decir, la mariposa no posee la sabiduría o el juicio que le permitirían pensar en preservarse. En consecuencia, nunca podrá desarrollar por iniciativa propia algún tipo de camuflaje como medio de defensa. Es nuestro Señor, el Uno, Quien ha creado todas las técnicas que facilitan la vida y Quien ha creado los cielos, la tierra y todo lo que hay en ellos y entre ellos. La oruga, que se desarrolla bajo la protección de las técnicas de defensa suministradas por Dios, se llena la boca con hojas y come lo más que puede, hasta casi reventar, y se encierra en un saco ella misma. Ahora empieza la metamorfosis (tercera fase). Desarrolla un caparazón duro y pasa a llamarse “crisálida”. En esta etapa no ingiere nada y utiliza la energía de las hojas con las que casi se atragantó poco antes, cuando aún era oruga. El caparazón de la crisálida se adhiere a la hoja de una planta, a una piedra, a una rama u otro objeto. Si encuentran alguna obsérvenla porque en su interior podrán ver la delineación todavía rudimentaria de la trompa (probóscide) y los miembros que tendrá la mariposa. Después de unos diez días se rasga el caparazón en unos pocos minutos y sale la mariposa de la crisálida. En ese momento las alas todavía no tienen sus medidas normales. Comienza la etapa de expansión de las alas (cuarta fase). Lo hace con un líquido que bombea allí y el sobrante lo expulsa del cuerpo. Como las alas quedan mojadas, espera que se sequen e inmediatamente después comienza a volar sin ningún tipo de entrenamiento. Las alas también le ayudan a respirar. Como vemos, hasta esta pequeña criatura es un gran milagro creado por nuestro Señor. Los científicos han estado investigando para responder a la siguiente pregunta: ¿Cómo se determina la transformación de la oruga en mariposa? Dicho cambio se produce solamente porque nuestro Señor lo desea. Dios nos muestra lo variadas que son las existencias que El crea y las maneras sin precedentes en que puede hacerlas pasar por etapas distintas. Otro milagro es que las alas de las mariposas están cubiertas de laminillas colocadas una sobre otra. ¿Se les ocurre cómo pasaron a existir esas alas? ¿Es posible que las laminillas se hayan juntado de manera casual para formar un ala con una estructura tan perfecta? ¿También las laminillas se habrán formado por sí solas? ¿O será que por propia iniciativa las mariposas colocaron una laminilla sobre otra para construir el ala? ¿Puede ser que después de eso las mariposas fijaran esas alas sobre sus espaldas? Como dijimos, aunque la mariposa no puede verse la espalda, allí tiene estructuras simétricas perfectas. Las laminillas están ordenadas de una manera tan precisa sobre ambas alas, al punto que éstas son idénticas. Si al mismo componente de cada ala lo miden con un instrumento de precisión, verán lo iguales que son. Lo que nos está mostrando esto es el arte, el conocimiento sin fin y el poder ilimitado de nuestro Señor. Al verlo deberíamos reflexionar sobre la creación de la mariposa y honrar a Dios.
LOS PECES QUE HABITAN LOS OCEANOS
La casa en la que vivimos, la escuela a la que vamos, la calle por la que caminamos, los parques en donde jugamos, el aire que respiramos, son todas cosas propias del “mundo” de los humanos y de una serie de animales y vegetales. Pero existen otros ambientes, otros “mundos”, que no nos son muy familiares. Uno de ellos lo solemos ver en la TV, con sus propias plantas y animales. Nosotros no podríamos vivir allí, ni siquiera respirar, a la vez que sus moradores tampoco lo podrían hacer donde normalmente estamos nosotros. Ese “otro mundo” del que hablamos es el submarino, en el que viven no sólo los peces sino también, reptiles, insectos, plantas y millones de otras criaturas. Todos los que allí habitan tienen métodos particulares de comer, respirar y dormir. El sistema respiratorio de los peces es distinto del de otro animales. Se preguntarán cómo funciona. Les contamos. El agua pasa continuamente por la boca y a través de unos arcos a los costados de la cabeza que se llaman agallas. Estas poseen capilares que son los que toman el oxígeno disuelto en el agua, a la vez que liberan el dióxido de carbono que encierran en el cuerpo. La mayoría de los peces tienen narices pero no las usan para respirar sino que les sirven para reconocer el olor del entorno mediante el agua que entra por allí y llena unas bolsitas en el otro extremo. Los tiburones se valen de esta técnica para detectar a sus presas. El pez no tiene párpados como los humanos. Observa el mundo a través de una cortina transparente que le cubre los ojos y se asemeja a las antiparras de los buceadores. Debido a que necesita ver los objetos que están muy cerca de él, ha sido creado con las condiciones para hacerlo. Tiene la capacidad de ver objetos esféricos y estructuras tiesas cercanas. Cuando quiere observar un objeto distante retrae el sistema de lentes por medio de un mecanismo ligado a un músculo específico en sus ojos. Junto a sus cinco sentidos básicos (visual, olfativo, auditivo, táctil y gustativo), el pez dispone de otro que percibe el mundo exterior: sus líneas “laterales”. Sucede que nervios sensibles que se ubican junto a esas líneas detectan la medida y dirección de los objetos que los otros sentidos pasan por alto. Gracias a eso el pez caverna puede moverse fácilmente en la oscuridad. En la práctica, se trata de una especie de radar o sonar subacuático. Por otra parte, muchos peces tienen una especie de globo lleno de aire en la cavidad abdominal gracias al cual mantienen el equilibrio en el agua. Los peces creados por Dios, con sus bellos colores y forma de moverse, asombran a todas las personas. Es difícil encontrar tan vívidas tonalidades en otros animales. Puede ser que todo lo dicho hasta ahora les resulte más o menos conocido. Pero hay otras cosas que les sorprenderán. Los peces más grandes necesitan normalmente que otros más pequeños les saquen los parásitos que llevan encima, incluso los que tienen en los dientes y las agallas. Los limpiadores lo hacen sin miedo ni temor metiéndose en sus bocas. ¿Cómo saben los más pequeños que no corren ningún riesgo? ¿Por qué confían en el pez grande? Parecería que hay un acuerdo entre ellos. ¿Cómo puede estar seguro el limpiador que el otro no violará el acuerdo y se lo comerá después de que termine su tarea? Lo cierto es que el limpiador siempre está en inferioridad de condiciones, pero Dios ha inspirado a ambos para que conviven, es decir, ha inspirado al grande que no le produzca ningún daño al pequeño y a éste que no sienta temor. Mientras el grande es limpiado, el limpiador se alimenta con los parásitos que le saca. Es por inspiración de Dios que ambos viven en armonía y cooperación.
EL PEZ PAYASO
La característica más interesante de este pez, adornado con colores brillantes, es el lugar que le eligió Dios para vivir, es decir, las “ramas” de una criatura parecida a una planta llamada “pluma de mar”. Sobre sus “ramas” hay cápsulas venenosas y los peces que las tocan quedan dañados o se mueren. Pero el pez payaso permanece siempre inmune porque cuenta con una secreción especial que lo aísla del producto nocivo. Por otra parte, se refugia allí para protegerse de sus predadores. ¿No les parece algo asombroso? Este pez se oculta entre esas cápsulas venenosas como si supiera que no saldrá perjudicado, en tanto que otros peces no pueden acercarse allí por carecer de defensa frente a ese elemento químico. Está claro que ni el cerebro ni su habilidad le pueden proveer al pez payaso del conocimiento y capacidad que exhibe. Alguien le inspira y dota con los mecanismos prácticos para mantenerse a salvo. Ese inspirador es Dios, el Creador de los cielos y de la Tierra y de todo lo que hay en ellos y entre ellos.
EL DELFIN Y SU ROSTRO SONRIENTE
Ningún otro animal es tan simpático y amigable con los seres humanos como el delfín. Su docilidad y maneras afectuosas son obvias en su rostro. Al momento de tener un hijo, sale primero la cola del pequeño, después el cuerpo y finalmente la cabeza. Para alimentarlo la madre contrae y afloja sus glándulas mamarias y de ese modo le rocía el alimento dentro de la boca. Lo hace de la misma manera que nosotros al apretar una botella de plástico con una abertura pequeña, de modo de poder verter su contenido dentro de la boca. Los mamíferos terrestres no necesitan ese mecanismo, pero para los mamíferos que viven en el agua es esencial. ¿Es posible que lo haya diseñado y construido el animal? ¿Es posible que haya sentido la necesidad de emplear este método y entonces agregase a las glándulas mamarias los músculos que sirven para cumplir esta tarea? Como es fácil de entender, nada de eso es posible. Como ya venimos repitiendo, Dios creó el cuerpo de la mamá delfín de una manera extraordinariamente apropiada para las necesidades del bebé delfín. Estos animales poseen un sistema respiratorio similar al de los humanos. Pero a diferencia de nosotros, no tienen la nariz en la mitad de la cara sino en la parte de arriba de la cabeza. Inhalan aire igual que nosotros antes de zambullirse y lo retienen mientras bucean. Al volver al exterior y antes de llegar a la superficie, lo expulsan con potencia a través del respiradero. En la TV habrán visto la manera ágil y sin esfuerzo con que nadan los delfines y la forma en que se deslizan velozmente junto a los barcos. Son muy buenos nadadores, especialmente gracias a su piel suave y resbaladiza. También les sirve muy bien la nariz, a la que llamamos trompa. Tiene la forma más adecuada para desplazarse en el agua, motivo por el cual se constituyó en modelo para el diseño de la proa de barcos más veloces. ¿Sabían que el delfín carece de olfato y es ciego? Pero Dios le proveyó de un sentido auditivo avanzado con el que puede oír ruidos que se producen a muchos kilómetros de distancia. Además, por medio de un sistema que se asemeja al sonar, logra determinar rápidamente su camino y la ubicación de sus presas. El sonido producido por el delfín, inaudible para nosotros, se expande en la forma de ondas sonoras subacuáticas. Cuando encuentra un obstáculo rebota allí y vuelve al animal. El tiempo que transcurre entre la emisión y la recepción, determina la distancia del objeto en el que rebotó. Es este precisamente el sistema que inspiró a los científicos para el desarrollo del sonar usado en los submarinos. El sentido auditivo del delfín es tan bueno, que le protege de caer presa de otros peces.
LAS BALLENAS SON MUY GRANDES
Las habitantes más grandes del mundo son las ballenas. La conocida como “azul”, pesa más de ciento cincuenta mil kilogramos y tiene más de treinta metros de largo. Para darnos una mejor idea de su tamaño, piensen que si la paran sobre la cola, la altura que alcanza es igual a la de un edificio de cinco pisos. Tengan en cuenta también que su peso es igual al de 25 a 30 elefantes juntos. ¿Cómo hace este animal gigante para bucear a unos mil metros de profundidad y volver luego a la superficie tranquilamente? Piensen en que si un barco de ciento cincuenta mil kilogramos y treinta metros de largo se hunde a unos mil metros, se necesitan años de trabajo y esfuerzo para sacarlo de nuevo a la superficie. Sin embargo, gracias a las facultades que Dios concedió a las ballenas, pueden volver al nivel del mar en quince o veinte segundos. Además, pueden flotar fácilmente. La ballena una buceadora muy hábil y Dios le ha dado un cuerpo muy resistente a las grandes presiones de las profundidades oceánicas. El oxígeno que circula en su sangre y músculos se combina con otros elementos químicos y lo utiliza bajo el agua. También tiene un sistema circulatorio que no se presenta en otras criaturas: puede enviar sangre directamente desde los órganos internos al cerebro. De ese modo, mientras permanece sumergida y hasta que sale a la superficie para respirar, puede enviar el oxígeno que tiene diseminado en el cuerpo directamente al cerebro, que es el órgano que más lo necesita. Dicho sistema tan magnífico que asombra a los científicos, es una manifestación del arte de Dios. Es por eso que puede permanecer bajo el agua de quince a veinte minutos sin respirar. Además, a diferencia de los humanos, las ballenas no quedan lisiadas o dañadas al subir rápidamente a la superficie. Probablemente preguntarán a qué daños nos referimos. Veamos esto. En el caso de los seres humanos, si la presión sobre el cuerpo aumenta o se reduce de golpe, el organismo sufre cambios que pueden lastimarlo e incluso matarlo. Es por eso que los buceadores que se sumergen muchos metros lo hacen por etapas, deteniéndose algunos momentos para que el físico se acostumbre a los cambios de presión de cada tramo. Y al volver a la superficie deben hacerlo también por etapas por el mismo motivo. Si no se toma esta precaución las venas del buzo se dañan y, como dijimos, puede morirse. Pero las ballenas no tienen este problema porque Dios las ha dotado con los mecanismos necesarios para sobrevivir normalmente en el medio que habitan. Pueden vivir perfectamente en los océanos, del mismo modo que nosotros lo hacemos en tierra firme. Seguramente casi todos ustedes habrán visto cómo la ballena lanza por el agujero en la parte superior de la cabeza lo que se observa como un chorro de agua. ¿Sabían que ese agujero es la nariz? La usa solamente para respirar y enviar oxígeno a los pulmones, aunque algunos creen que también arroja agua por ese orificio. Pero lo que sale por allí es aire viciado bastante caliente junto con vapor de agua. Por eso nos confundimos. Por lo general este animal tiene la forma de un torpedo y es muy apropiado para nadar. Además, a diferencia de otros peces, la ballena tiene la cola horizontal, paralela a la superficie acuática, lo cual le ayuda a impulsarse hacia delante. Bajo la piel posee una capa de grasa de aproximadamente cincuenta centímetros y su función básica es mantener la temperatura corporal entre 34°C y 37°C. Nos conviene recordar ahora que, contrariamente a lo que muchos creen, la ballena no bebe agua del mar porque la sal le daña el organismo. El agua dulce que necesita la toma de los alimentos que come. Todos los años, en diciembre y enero, las ballenas grises emigran del Mar Artico hacia la costa sureña de los EEUU y llegan hasta California. Lo hacen para que sus bebés nazcan allí. Resulta interesante saber que la mamá embarazada no come nada en todo el viaje porque en realidad no lo necesita. Aprovecha los días con muchas horas de luz solar en el Mar del Norte para alimentarse muy bien allí y de ese modo acumula suficiente energía para el largo viaje. El parto se produce apenas llega a la costa occidental de México. El bebé se alimenta de inmediato de la leche de la madre y acumula toda la grasa que puede, pues se tiene que preparar para el viaje que luego tendrá que hacer hasta el Mar del Norte, generalmente en marzo. La ballena, como otros mamíferos, le da la teta a su hijo, pero éste no succiona porque podría tragar agua salada, dañina para su organismo. Lo que hace entonces la mamá es contraer un músculo que rodea la glándula mamaria, igual que el delfín, y de ese modo rocía la leche directamente en la boca del bebé. Se trata de una leche distinta de la que conocemos nosotros porque es prácticamente sólida y muy grasosa, gracias a lo cual nunca se mezcla con el agua del mar. Es decir, lo que el bebé “toma” --en realidad come--, se le disuelve en el estómago y cubre su necesidad de agua. No podemos más que llegar a la conclusión de que Dios ha dado a las ballenas bebés la forma de nutrición más adecuada. También les ha provisto de un mecanismo de la visión con una secreción grasosa y transparente que les cubre los ojos y las protege de los efectos dañinos del agua del mar. Por otra parte, las ballenas tienen aguzados los sentidos del tacto y auditivo. Este último les sirve para determinar el camino a seguir en el mar porque se guían por el eco de los sonidos que emiten. El principio por el que opera ese mecanismo es similar al del radar. Esta característica de la ballena fue la que inspiró el “invento” del radar. Los científicos creen que el sonido que emiten las ballenas constituye un lenguaje muy complejo e importante para la comunicación e interacción entre ellas.
CONCLUSION
Ahora podemos meditar un rato sobre todo lo que aprendimos de los animales que vimos aquí, desde la oveja que reconoce a su bebé por el olor hasta la cebra con sus rasgos distintivos y simétricos, por nombrar sólo a dos. Sin embargo, lo más importante que resalta este libro, es decir, el conocimiento más importante que suministra, reside en que es Dios Quien les ha concedido todas las características que poseen. Es Dios, el Creador de todos los seres vivos, Quien les ha enseñado cómo sobrevivir en una u otra etapa de su vida, como lo hemos mostrado a lo largo de estas páginas. Muchos dudan de que Dios sea el Creador de todo. Veamos. Al comenzar a jugar con una computadora lo único que tienen que hacer ustedes es apretar un botón, con lo que se ponen en marcha operaciones muy complejas en la estructura de la máquina. Mientras tanto disfrutan del entretenimiento. Algo parecido sucede cuando leen, pues aunque parece algo muy sencillo no es así. Dicho en otras palabras, además de tener los ojos abiertos y pasar un buen momento, sus ojos tienen que realizar muchas operaciones muy complejas al mismo tiempo aunque ustedes no lo sepan. Y al igual que los componentes de la computadora, los del ojo, que son bastantes, no pasaron a existir espontáneamente. Al igual que todas las cosas que existen, es Dios Quien los creó del mejor modo. Nuestro Señor, el Propietario del conocimiento infinito, nos ha obsequiado a todos los humanos con las características físicas que nos hacen posible una vida saludable. Por eso mismo deberíamos ser agradecidos con El. Cuanto más aprende la persona con discernimiento y sentido común acerca de la creación de Dios, más profunda se convierte su fe en El y más reverencia Su potestad y poder. En verdad, hasta la más simple cualidad de una criatura nos hace pensar en Dios si somos juiciosos y razonables. No sólo los seres vivientes sino todo lo que nos rodea y todo lo que sucede en nuestro entorno, pone a nuestra disposición evidencias concretas de la existencia de Dios. Esta realidad importante es enfatizada en un versículo: En la creación de los cielos y de la tierra, en la sucesión de la noche y el día, en las naves que surcan el mar con lo que aprovecha a los hombres, en el agua que Dios hace bajar del cielo, vivificando con ella la tierra después de muerta, diseminando por ella toda clase de bestias, en la variación de los vientos, en las nubes, sujetas (al servicio de quienes las necesitan) entre el cielo y la tierra, hay (es decir, en todo ello hay), ciertamente, signos para los que razonan (Corán, 2:164). También ustedes deben reflexionar sobre todo esto y no olvidar nunca el poder y potestad infinitos de Dios, nuestro Señor, y que es El Quien no da todos los favores que nosotros apreciamos. Siempre deben tener presente que el conjunto de las bellezas que ven por todas partes, existen, están allí, porque Dios las crea y mantiene permanentemente. FIN (the end)
Dijeron: “¡Gloria a Ti! No sabemos más que lo que Tú nos has enseñado. Tú eres, ciertamente, el Omnisciente, el Sabio” (Corán, 2:32)
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